El secreto de la eterna juventud: 8 hábitos para envejecer mejor y cuidar tu cerebro según una endocrina

Los 60 son los nuevos 50, los 50 son los nuevos 40... Y así, sucesivamente. Pero, ¿y si más allá de una cuestión estética, quisiéramos cumplir años sin perder salud ni energía? Hacernos mayores es inevitable, pero la forma en que lo hacemos depende en gran medida de nuestro estilo de vida. Entonces, ¿cuál es la fórmula para envejecer mejor?

Paloma Gil, especialista en Endocrinología y Nutrición, ha descubierto la manera de ganar años sin perder calidad de vida, para así poder disfrutar al máximo de nuestras pasiones y de la compañía de nuestros seres queridos durante más tiempo.

Para ello, revela cuáles son los ocho hábitos fundamentales que pueden marcar la diferencia y ayudarte a envejecer de forma saludable, desde la importancia de una buena alimentación hasta la necesidad de mantenerse activo físicamente y mentalmente. Cada hábito es una pieza crucial en el rompecabezas de una vida longeva y satisfactoria.

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¿Cuándo se comienza a envejecer?

No hay una edad exacta en la que se pueda decir que se empieza a envejecer, sino que depende de muchos factores, como nuestros hábitos alimenticios, de ejercicio, de sueño, de hidratación, de cuidado de la piel, de gestión del estrés, de relaciones sociales y de estimulación mental influyen en nuestro bienestar físico y emocional.

Según la ciencia, el envejecimiento es un proceso complejo que afecta a diferentes partes del cuerpo y a diferentes niveles biológicos, psicológicos y sociales. "El mero hecho de vivir conlleva un desgaste celular y molecular que debe ser reparado continuamente", explica la Dra. Paloma Gil.

Sin embargo, algunos estudios recientes han intentado medir la edad media a la que comienzan a envejecer las personas. Uno de ellos, realizado por investigadores de la Universidad de Stanford, sugiere que el cuerpo humano empieza a mostrar los primeros signos de envejecimiento a partir de los 34 años, tras hallar que en torno a esta edad el metabolismo se vuelve más lento, la estructura ósea se debilita, empezamos a tener problemas de memoria, o empeora la calidad del sueño, entre otros.

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¿Cómo podemos envejecer mejor?

El cuidado de la salud es esencial para envejecer bien, "pero no solo cuando somos mayores, sino desde que nacemos", advierte Gil. Nuestro cuerpo se desgasta con el tiempo, y si queremos prevenir y mejorar nuestro envejecimiento, debemos empezar a cuidarnos hoy mismo.

Estos son los 8 hábitos que plantea la experta, basándose en la ciencia, que influyen positivamente en tu cerebro y te ayudarán a envejecer de forma saludable:

Cuida tu sueño

El sueño es esencial para la salud de tu cerebro, ya que durante este periodo se produce la limpieza de las toxinas que se acumulan en tus neuronas. Dormir bien te ayuda a prevenir el deterioro cognitivo y a mejorar tu memoria y tu concentración.

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Aprende a manejar el estrés

El estrés es una reacción natural ante situaciones difíciles, pero si se prolonga en el tiempo puede dañar tu cerebro. Un estudio de Harvard, publicado en la revista Cell Metabolism, ha demostrado que manejar y controlar el estrés es determinante para lograr un envejecimiento exitoso y longevidad.

Como apunta la Dra. Gil, "el estrés crónico provoca inflamación, oxidación y acumulación de residuos en el tejido cerebral", lo que afecta a su funcionamiento y aumenta el riesgo de padecer enfermedades neurodegenerativas. Por eso, es importante que busques formas de relajarte y de resolver tus problemas.

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Mantén un peso saludable

El sobrepeso y la obesidad no solo perjudican tu salud cardiovascular, sino también tu salud cerebral. El exceso de grasa corporal genera sustancias inflamatorias que aceleran el envejecimiento de tus neuronas y alteran su comunicación. Así lo demuestra un estudio publicado en la revista Neuropsychology sobre el Índice de Masa Corporal y funcionamiento neurocognitivo a lo largo de la vida adulta, que determinó que un IMC elevado se asocia directamente con una disminución de la atención, la velocidad de procesamiento del cerebro y la velocidad motora fina.

Si quieres cuidar tu cerebro, la endocrinóloga sugiere que controles tu peso con una dieta equilibrada y personalizada.

Practica el ayuno

El descanso de tu sistema digestivo mejora tu metabolismo, reduce la inflamación, estimula la producción de nuevas neuronas y protege contra el estrés oxidativo. La experta recomienda respetar cada día al menos de 8 a 12 horas de ayuno.

Aliméntate bien

Tu alimentación influye en tu salud cerebral, por lo que debes elegir bien lo que comes. Prioriza los alimentos de origen vegetal, ricos en antioxidantes, vitaminas y minerales que protegen tus neuronas del daño. Consume también grasas saludables, como las que se encuentran en el pescado azul, las semillas, los frutos secos y el aceite de oliva virgen, que favorecen la formación de la mielina, la capa que recubre y aísla las fibras nerviosas. Evita las grasas saturadas y los azúcares añadidos, que contribuyen al desgaste neuronal. 

No te pierdas los alimentos que toma a diario un científico de Harvard porque ayudan a rejuvenecer 30 años, y los 6 que evita.

Muévete más

El ejercicio físico es uno de los mejores aliados para tu cerebro, ya que mejora el flujo sanguíneo, el suministro de oxígeno y nutrientes, y la eliminación de desechos.

Además, como apunta Gil, "el deporte estimula la liberación de sustancias neurotróficas como el BDNF, una proteína que favorece el crecimiento y la conexión de las neuronas, mejorando la memoria y el rendimiento neuronal". El ejercicio también te ayuda a liberar endorfinas, que te hacen sentir bien y reducen el estrés y el dolor.

Desafía tu cerebro

Tu cerebro necesita estímulos para mantenerse activo y prevenir el deterioro. Por eso, es bueno que aprendas cosas nuevas, que salgas de tu zona de confort y que pongas a prueba tus habilidades. Puedes apuntarte a clases de baile, de idiomas, de música, o hacer pasatiempos como sudokus, crucigramas o rompecabezas. Estas actividades te ayudan a aumentar la plasticidad cerebral y la producción de factores neurotróficos, como el BDNF, que refuerzan las conexiones neuronales.

Socializa más

La soledad es perjudicial para tu cerebro, ya que puede provocar depresión, ansiedad y deterioro cognitivo. Por el contrario, tener una vida social activa y satisfactoria es beneficioso para tu cerebro, ya que estimula tus neuronas, mejora tu estado de ánimo y te hace sentir más feliz.

Una investigación de la Universidad de Sichuan en el Oeste de China publicada en el Journal of Epidemiology & Community Health, reveló que socializar con otras personas a diario y participar en actividades grupales aumenta la esperanza de vida.

Por eso, no te aísles y busca el contacto con tus familiares, amigos, vecinos o personas de tu entorno. "La comunicación y las relaciones sociales son un estímulo para tu cerebro y, por lo tanto, para ti", asegura Paloma Gil.

Tu cerebro es un órgano que merece toda tu atención y cuidado si estás en busca de la "juventud eterna". Para mantenerlo sano y joven, no solo debes evitar los factores que lo dañan, sino también potenciar los que lo benefician. Ahora que ya conoces la fórmula para envejecer mejor, es hora de que empieces a cuidarte desde hoy mismo.