El dilema de si tener o no plantas en el dormitorio, es tan antiguo como el de la tortilla de patatas con o sin cebolla. En realidad, la duda surge como respuesta a cierta preocupación por la salud más que por un tema de gustos. Y es que, por regla general, el dormitorio es el último rincón en el que nos planteamos poner plantas debido a la creencia de que no son del todo beneficiosas para la salud cuando dormimos.
Por otro lado, la falta de espacio también complica su elección y su ubicación. Si quieres poner plantas en el dormitorio pero no sabes dónde, dispones de opciones muy interesantes para hacerlo como apoyarlas sobre la cómoda o colgarlas del techo o la pared. Existen muchas plantas de interior pequeñas que se adaptarán sin problema a esos lugares.
![Plantas interior resistentes](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 900 900"%3E%3C/svg%3E)
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Isabel Zúñiga
¿Me quedaré sin oxígeno si duermo con plantas?
Tal como explica Diego Olivares en su Manual para amar (y no matar) tus plantas, una obra de referencia sencilla, amena y rigurosa, que te ayudará a adentrarte en el mundo de las plantas, existen diversos estudios que afirman que las plantas poseen la capacidad de detectar la concentración de oxígeno ambiental y adaptar su funcionamiento y necesidades en base a ella.
Además, mientras que las plantas consumen alrededor del 0,1 por ciento del oxígeno de la habitación, las personas consumen un 3 por ciento en promedio. Es más, tener plantas en el dormitorio puede mejorar las condiciones de tu habitación, ya que pueden llegar a aumentar los niveles de humedad.
Según un estudio realizado por la NASA en 1989, también hay plantas purificadoras que filtran algunas sustancias tóxicas que hay en el aire de la habitación, como el formaldehído.
¿Dónde colocar las plantas en la habitación?
Lo primero que tienes que tener en cuenta son las necesidades de cada planta, así que ubícalas en un lugar fijo y no las "estreses" con cambios innecesarios, exposición a fuentes de calor directo o corrientes de aire. A partir de ahí, ya solo te quedará elegir la especie que más te guste. A continuación encontrarás varias idóneas para el dormitorio, y otras que no lo son tanto.