Cuando te divorcias comienzas una nueva etapa en la vida. Se abren ante ti miles de opciones que configuran a una nueva mujer con todo por explorar. Y si no, que se lo digan a la Infanta Cristina, que, desde que vuelve a estar soltera, no ha parado ni un momento

La relación de la Infanta Cristina con Iñaki Urdangarin ha sido una de las relaciones de royals que más titulares ha generado en la prensa española, y en la internacional, pero desde que firmaron el divorcio a finales del pasado año, la hija de Juan Carlos I está demostrando su independencia y sus ganas de disfrutar de esta nueva etapa. 

Si bien la Infanta Cristina continúa con su vida normal, trabajando y viviendo en Ginebra con sus hijos, sí que hemos podido ver un cambio en su vida, en la que se muestra mucho más presente públicamente y relajada, disfrutando de más tiempo de ocio.

Se apunta a muchos planes divertidos

En muy pocas semanas la hemos podido ver en muchos y muy variados planes y compromisos, tanto familiares, como con amigos y amigas. Por ejemplo, en febrero no dudó en irse unos días a Las Palmas de Gran Canarias para disfrutar de uno de sus eventos más importantes, los Carnavales. 

Allí estuvo acompañada de su prima, Alexia de Grecia y su marido, Carlos Morales, que disfrutaron como uno más del pasacalles, las carrozas y el baile que se realiza en las calles de la Isla. Incluso ellos mismos se grabaron bailando y disfrutando del momento. Según los asistentes, la Infanta Cristina estaba muy relajada y natural, e incluso accedió a hacerse fotos con quienes la reconocían por la calle.

Volvió rápidamente a Ginebra, pero pocos días después regresó a España ya que no quiso perderse la boda de los hijos de unos buenos amigos. El enlace de Marta Urquijo Barreiros y Joaquín Marcos en la iglesia de Santa María de Caná, en Madrid, contó con la presencia de las dos Infantas, que se mostraron muy divertidas, rodeadas de sus amigos y disfrutando juntas del amor de esta joven pareja. 

Infanta Cristina
Gtres

Encuentros familiares

Posteriormente, esta semana, también la hemos podido ver acudiendo a un evento familiar un poco más triste, ya que se reunía con su familia: sus padres Juan Carlos I y Sofía, sus hermanos Felipe VI y Elena, así como la reina letizia, y con un gran número de royals europeos más, en la capilla de Windsor, en Reino Unido, para acudir a una misa homenaje a Constantino de Grecia, el hermano de su madre, que falleció hace un año.

Más contentos con su presencia 

Doña Cristina acude a menudo también a Barcelona, cada quince días, como tiene acordado con su exmarido en la negociación de la custodia de sus hijos. Y suele aprovechar esas visitas a la ciudad condal, sobre todo para ver los partidos de Pablo Urdangarín, su hijo mayor. La mayor presencia de Cristina no solo se está notando en los medios, sino en los propios familiares que indican que “Estuve años sin verla, ahora la veo muchísimo, estamos muy contentos”.  

Johanna Zott y la infanta Cristina
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Una separación en diferentes fases

Aunque la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarin firmaron el divorcio el 21 de diciembre de 2023, no se hizo público hasta el 24 de enero de 2024. Pero esta fue la parte administrativa, ya que en realidad la pareja se había separado muchísimo antes. Fue en el año 2022 cuando, tras publicarse unas fotografías del jugador de balonmano con otra mujer, el matrimonio decidió separarse. 

En aquel momento fue una separación pactada, y posteriormente se ha producido un divorcio “tranquilo” y, aunque los términos del acuerdo no se han hecho públicos, sí se conoce que ha sido de mutuo acuerdo y que ni la Infanta Cristina, ni Urdangarin, recibirán pensión económica del otro ex cónyuge.

Durante todo este tiempo, la propia Infanta ha jugado al despiste con su anillo de bodas, poniendo en su dedo anular diversos anillos dorados y tapándose la mano, para que la prensa no pudiera averiguar si la alianza matrimonial estaba, o no, allí. Por eso ver ahora la nueva vida de Cristina de Borbón más relajada y dispuesta a apuntarse a muy diferentes eventos nos hace pensar que ha pasado página y está dispuesta a vivir su nueva vida como divorciada.