Amalia de Holanda arrasa con el bolso que Letizia querrá copiar y Leonor le pedirá prestado

Lo de Amalia de Holanda ha sido una sorpresa en toda regla. Lleva años copando titulares por ser la heredera al trono, pero lo cierto es que no ha sido hasta ahora cuando la joven, de solo 20 años, ha dado un paso al frente como la mujer que renovará la institución. Lo ha hecho aportando elegancia y cercanía, dos conceptos que parecen alejadísimos pero que en ella funcionan a la perfección.

Amalia, pasión por los complementos arriesgados

Si ya en su primera cena de gala deslumbró con un vestido imperial de gasa, con capa a juego, que la dotaba de un halo helénico de lo más romántico, en esta ocasión lo ha conseguido con un vestido bastante m��s discreto, en verde jade, un color que también ha sido usado por nuestra Reina estos días,  pero que ha cubierto con un elegantísimo trench.

Pero, sin duda, lo mejor de todo su estilismo eran sus complementos. La jovencita parecer haber heredado de su madre la afición por los accesorios llamativos y, esta noche en el museo, la holandesa se ha decantado por apostar todo al dorado. Tanto sus sandalias de tiras eran metalizadas, como también lo era su bolso, el gran punto fuerte de todo el look. Se trata de un minicapazo de mano, con asa rígida cuadrada y material trenzado. Una pieza perfecta de cara a la primavera y al verano. Letizia, que tan fan es de esta clase de bolsos, debe de estar anotándolo ya en su 'wishlist', y Leonor y Sofía suplicándole que se lo deje cualquier noche de estas.

La noche en la que Amalia eclipsó a Letizia y a Máxima

En la cena de gala celebrada con motivo de la visita de Estado de Letizia, Amalia, en su modo más adulto, ha empleado por primera vez algunas de las joyas más importantes de la familia, entre ellas, la tiara Pavo Real. Una verdadera exquisitez de artesanía joyera, realizada con rubíes y diamantes engastados. A juego, una gargantilla que quedaba velada por la gasa de la capa. Auténtico deleite visual.

Ni Máxima ni Letizia le complicaron el camino a Amalia y hoy han vuelto a hacer lo mismo, cediéndoles todos los ‘ohhes’ a la veinteañera. Y es que mientras el look de la reina holandesa resultó descafeinado para lo que ella nos tiene acostumbrados, la Letizia más regia patinó con un vestido que no era para estar sentada, sino de pie. La madre de Leonor y Sofía pasó gran parte de la noche entre taburetes y sillas debido a la crisis de dolor intenso que le provocó su Neuroma de Morton, con el que lleva tiempo lidiando.

Esta noche la joven ha sido bastante más discreta con un estilismo de lo más juvenil y acorde a su edad. Muy a la moda y con un estilo que, quizás, esperaríamos encontrar en Leonor; puesto que todavía no parece haber dado con su propio gusto y manera de saber llevar las prendas, que parecen ser escogidas por su madre.

Amalia ha dado ya su primer paso adelante como futura soberana; su homologa española no debe tardar en darlo. Ese día todas las miradas se dirigirán a la dispuestísima Leonor, y, quién sabe si consiga lo que ha logrado la mismísima Amalia, eclipsar a la reina de la moda, Letizia.