La base es uno de los elementos más importantes de un buen maquillaje. Sirve para unificar el tono de la piel, disimulando cualquier imperfección. Pero elegir la que mejor te va no es tarea fácil. Así que para hacerte la vida más sencilla –y que estés mucho más guapa todos los días– hemos creado una guía con los 10 puntos que debes tener en cuenta para acertar. Toma nota.
Cómo elegir bien la base de maquillaje
- El formato. Debe resultarte fácil de aplicar y adecuarse a tu tipo de piel. Tienes bases en polvo, compactas, líquidas, en crema, en stick o en mousse.
- La aplicación. Con una brocha el resultado es muy natural en el caso de las bases más líquidas y se desperdicia menos producto. Aun así, quédate con la que te resulte más fácil de aplicar a ti, ya sea con los dedos (texturas mousse o crema), o con la esponjita para las bases compactas.
- El tono. Otro de los puntos esenciales es elegir el tono, debe ser exactamente igual que el de tu piel, ni más claro ni más oscuro. Para acertar, pruébalo en el interior del brazo, nunca en el dorso de la mano. Si quieres verte más morena, recurre a polvos bronceadores.
- Factor de protección solar. En invierno basta con un FPS 20, pero en verano es mejor recurrir al 50. También puedes elegir una base sin factor de protección y aplicar antes un protector solar.
- Tu tipo de piel. Elígela hipoalergénica, si tienes la piel sensible; matificante, si tienes la piel grasa o problemas de acné; o antiedad –con propiedades tensoras–, si se empiezan a marcar las líneas de expresión o tienes ya algunas arruguitas.
- Tamaño. Las bases de maquillaje caducan en un año, así que no escojas un envase demasiado grande si crees que no vas a gastarla en ese tiempo.
- Hidratantes. Es importante que las bases sean hidratantes para evitar que el maquillaje se cuartee y aparezcan pellejitos.
- De larga duración. Si necesitas que tu maquillaje dure horas y horas intacto, escoge bases de larga duración (long lasting), las hay de hasta 24 horas.
- La cobertura. Dependiendo del estado de tu piel necesitarás más o menos cobertura. Pero recuerda que cuanto más fluida, mejor, porque la piel se ve más natural. En cualquier caso, difumina siempre muy bien.
- Pruébala a plena luz. Es importante que veas cómo te queda la base con luz natural y que la lleves puesta todo un día para comprobar cómo reacciona tu piel al llevarla.
Por Sonia Murillo