Lleva siempre una botella reutilizable llena de agua en el bolso. Elige un modelo de acero o de plástico duro libre de bisfenol A. Puedes “alegrarla” con un chorrito de limón, rodajas de pepino, hojitas de hierbabuena o cualquier otra hierba aromática. Toma dos vasos de agua durante las comidas y bebe siempre un vaso también después de tu taza de café. Prueba distintas infusiones y encuentra la que realmente te gusta. Reserva cinco minutos al día para crear tu momento infusión. Puedes ponerte pósits en tu lugar de trabajo o alarmas en el móvil que te recuerden que tienes que beber. Si quedas con amigos para salir y quieres tomar algo, pasa del alcohol y opta por agua con gas con hielo y una rodaja de limón.