Las cremas de verduras son uno de los platos de cuchara más apreciados porque su composición suele ser saludable y equilibrada, resultan muy saciantes, y como se pueden comer tanto calientes como frías, encajan en cualquier época del año. Crema de verduras Cremas de verduras hay infinitas, pero esta nos encanta porque mezcla varias de las hortalizas más usadas para hacer crema (calabaza, puerro, zanahoria, cebolla...) junto con un caldo de verduras. Como no le hemos puesto nada de leche ni de queso, resulta muy ligera. Y, además de vegetariana, encaja como receta vegana, ya que no lleva ningún ingrediente de origen animal. Ver receta paso a paso. Crema de calabacín La crema de calabacín es una de las estrellas de las cremas de verduras. Nosotros la hacemos con patata y, si la pruebas, no tenemos ninguna duda de que repetirás. Te contamos todos los trucos para hacerla y un montón de ideas para sacarle todo el partido. Ver receta paso a paso. Crema de calabacín light Ahora bien, si buscas cremas o sopas fáciles pero también ligeras, tienes que probar esta crema de calabacín light. Sustituyendo la nata por leche desnatada y un quesito bajo en calorías, y prescindiendo de los picatostes u otros tropezones calóricos, logramos rebajarle ¡casi 300 calorías! Ver receta paso a paso. Crema de calabaza ¿Preparada para disfrutar de lo lindo? Aquí tienes la receta de la crema de calabaza de toda la vida con su calabaza, su patata, su cebolla, un poco de queso y un toque de nuez moscada. Es uno de los platos de cuchara que siempre entra bien y gusta a casi todo el mundo. Ver receta paso a paso. Crema de calabaza al curry con cero grasas También tenemos una versión light de la crema de calabaza. Al prescindir de la nata o la crema de leche y el queso que se suele poner en la mayoría de cremas, conseguimos rebajar 120 calorías nada más y nada menos. Y con el toque de curry le damos un twist original y sofisticado. Ver receta paso a paso. Crema de puerro Para hacer esta crema de puerro, limpia y lava 2 puerros y 1 cebolleta. Trocéalos y rehógalos. Incorpora 3 patatas en daditos y rehoga 2 minutos más. Añade 1,5 litros de caldo de verduras, salpimienta y cuece todo junto unos 30 minutos. Retira del fuego, tritura hasta obtener una crema; y pásala por el chino si quieres que quede más fina. La puedes servir tanto caliente como fría acompañada de un chorrito de aceite, cebollino picado, frutos secos... Vichyssoise súper ligera Si eres aficionada a esta crema de puerros de origen francés, te enamorarás de nuestra vichyssoise súper ligera, una receta vegetariana con 125 calorías menos que la tradicional y todo el sabor. El truco es sustituir algunos ingredientes por versiones menos calóricas: manzana en lugar de patata, leche desnatada... Ver receta paso a paso. Crema de zanahoria Otra opción es decantarte por alguna alternativa a la típica crema de calabaza o de puerro como esta de zanahorias, que se puede tomar tanto fría como caliente. Gracias al poder del jengibre, que es una de las especias quemagrasa, resulta muy sana y equilibrada y ayuda a quemar grasa. Ver receta paso a paso. Crema de judías tiernas con gambas Es una variación del clásico salteado de judías con gambas pero con la verdura "camuflada", para que pase más desapercibida y entre más fácilmente a los que no les vuelven locos las hortalizas. Ver receta paso a paso. Crema de garbanzos Aparte de las clásicas cremas de verduras, también se puede hacer con legumbres como esta de garbanzos que tanto nos gusta en CLARA. Es otro modo de incorporar las dos o tres raciones de legumbres por semana recomendadas, en este caso en forma de crema y con un toque de aromática canela que le sienta de maravilla. Ver receta paso a paso. Crema de espinacas con huevos de codorniz Para hacerla, saltea un puerro y una zanahoria. Luego, incorpora 500 g de espinacas frescas y una patata cortada en daditos. Cuando las espinacas, se hayan reducido, añade caldo de verduras hasta cubrir. Cuece unos 20 minutos (hasta que la patata esté cocida) y tritura. Para acompañar y que el plato sea más completo, puedes añadirle huevo cocido (en este caso son de codorniz), almendra tostada y hojas de espinaca fresca salteadas para decorar. Descubre más recetas con espinacas. Crema de patatas Rehoga 1 puerro y 1 cebolla picados. Incorpora 4 patatas sin piel troceadas. Añade caldo de verduras hasta que cubra todas las hortalizas. Lleva a ebullición y cuece 30 minutos. Si se consume mucho, añade un poco de caldo. Pasa por la batidora hasta obtener una crema lisa. Ajusta de sal si es necesario. Y decora con chips de verduras y un hilo de aceite de oliva aromatizado con perejil picado. Crema de guisantes con huevo poché Necesitas un cuarto de puerro, una patata pequeña, tres puñados de guisantes congelados y un huevo. Rehoga el puerro y la patata en una cazuelita durante unos 5 minutos. Incorpora los guisantes, añade agua hasta que queden cubiertos, cuece 15 minutos más y tritura. Para completar, añade virutas de jamón y huevo duro. Es una de las cenas saludables fáciles de hacer ¡y deliciosas! Cremas de verduras: las mejores recetas Crema de calabaza. La hacemos con calabaza, patata, cebolla y un toque de nuez moscada. Crema de puerro. Necesitas puerro, cebolla, patata y la puedes combinar con yogur en lugar de nata. Crema de calabacín. Lleva calabacín, patata, cebolla y un buen caldo de verdura. Crema de zanahoria. La preparamos con zanahoria, cebolla y patata, y le damos un toque exótico con jengibre y leche de coco. Crema de judías verdes. Su base son las judías verdes junto con cebolla y patata. Crema de espinacas. Haces un sofrito de puerro y zanahoria, añades espinacas, cubres con agua y trituras. Crema de guisantes. Su ingredientes básicos son guisantes, patata y puerro. Crema de garbanzos. De base, garbanzos cocidos, calabaza y zanahoria. Y para aromatizar, canela. Cómo hacer una buena crema de verduras La base de las cremas de verduras son las hortalizas. Para que te queden bien, intenta utilizar verduras de temporada y de calidad. Para diferenciarlo de un puré, el otro elemento imprescindible es un líquido: agua, caldo, leche... Si te decantas por agua, que sea mineral, pero ten en cuenta que queda más rica con caldo de verduras. Para darle la consistencia cremosa, tradicionalmente, se solía añadir nata o queso, pero hoy en día se utilizan otros 'espesantes' mucho menos pesados como la manzana, la calabaza, la zanahoria, la patata... que además de darle cuerpo le dan sabor (y dulzor en algunos casos). Como acompañamiento, se solían poner picatostes de pan tostado o queso rallado, pero ahora se llevan decoraciones más saludables: frutos secos, semillas, germinados, hierbas aromáticas...