Muere a los 59 años Jean-Yves Le Fur, el marido ‘fallido’ de Estefanía de Mónaco y por el que acabó casada con su guardaespaldas

Se amaron hasta el punto de planear la más romántica de las bodas. Una boda fallida que nunca llegó a celebrarse. Hoy, treinta años más tarde, Estefanía de Mónaco llora al que fue uno de los hombres de su vida: Jean-Yves Le Fur.

El empresario ha muerto a los 59 años, debido a un cáncer de páncreas. La encargada de dar la noticia de su fallecimiento fue su exmujer. Porque Jean-Yves no se casó con Estefanía, pero sí formó una familia junto a la directora francesa Maïwenn. 

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El primer novio de Estefanía de Mónaco

Estefanía, la princesa rebelde, la princesa de las mil excentricidades, se enamoró perdidamente a principios de la década de los noventa de este atractivo buscavidas. Jean-Yves se presentaba ante todos como un joven de buena familia, aunque quizás nunca lo fue tanto. Tenía un enorme carisma y su magnetismo conquistaba a todos, incluyendo a los Grimaldi. 

Estefanía no era la única que veía con buenos ojos al entonces aprendiz de empresario, también lo hacía su polémica familia. Le Fur les encantaba. De ahí que dieran el visto bueno a poner en marcha su boda. Un enlace que jamás tuvo lugar. 

Y es que lo que al principio gustaba, después dejó de hacerlo. Sus virtudes pronto se convirtieron en grandes defectos. Los primeros rumores sobre el seductor Jean-Yves empezaron a sonar con fuerza. Al parecer, no solo había seducido a la casa real monegasca, sino también a multitud de otras mujeres. 

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El fin del compromiso de Estefanía de Mónaco y Jean-Yves Le Fur

Pero lo que sin duda hizo inclinar la balanza hacia el 'no' fue su polémico pasado laboral. Los medios de la época no tardaron en indagar sobre él. ¿Quién era el misterioso y primer novio (oficial) de Estefanía? ¿Qué escondía? ¿De dónde provenía? La realidad no tardó en salir a la luz. 

En 1990, tras su compromiso, se publicaba la noticia del pasado en prisión de Jean-Yves. Él, que entonces se dedicaba a la promoción inmobiliaria, veía como algunas de las supuestas irregularidades que había cometido salían a la luz. Los medios hablaban de que en 1985 estas le habían llevado a pasar más de un mes en prisión. Él lo negó todo, especialmente a su prometida.

Un marido condenado no era el príncipe azul que Estefanía imaginó para ella. Tampoco el que quería su familia. Así que todos estos ingredientes dieron como resultado la cancelación de los planes de boda al poco de anunciar su compromiso. El cuento de hadas acabó hecho añicos. 

Estefanía rehizo su vida con su guardaespaldas

Tras aquello, Jean-Yves Le Fur y Estefanía retomaron sus vidas como solteros y cada uno recompuso su corazón. Él con infinitas modelos y actrices, y ella con su guardaespaldas. La hermana de Alberto estaba sensible y encontró en Daniel Ducruet mucho más que un hombro en el que apoyarse. Su historia de amor jamás gustó a su familia. Para ellos, este romance no era más que una travesura más de la más rebelde de los hijos de Grace Kelly y Rainiero. 

Estefanía trató de probar que su amor no era solo un capricho de niña rica. La pareja tuvo dos hijos, Louis y Pauline, y acabaron casándose en 1995. Pero, en 1996, la princesa tuvo que acabar dando la razón a su familia: Daniel no era hombre para ella. Le había sido infiel y de la manera más humillante posible. Su matrimonio se disolvió al instante en el que ella le vio intimando con otra mujer en una piscina.  

Y mientras esto pasaba, Jean-Yves se enamoraba y dejaba atrás sus polémicas. Trabajó en una agencia de modelos y después, con todos sus contactos en el mundo de la moda, fundó dos revistas importantes, DS y Numéro. Su relación más importante fue con la directora de cine Maïwenn, con la que tuvo su único. Ella asegura que el empresario fue el gran amor de su vida y que el domingo 31 de marzo este falleció en sus brazos. Su matrimonio apenas duró dos años, pero su amor parece haberles durado toda la vida.