La dopamina es un neurotransmisor con un papel esencial en la comunicación neuronal que facilita múltiples funciones físicas, intelectuales y emocionales, ya que está vinculada a las sensaciones positivas y el placer. Con esta premisa, ya podrás imaginarte por dónde van los tiros cuando hablamos del estilo dopamina en decoración.
Esta tendencia surgió en el sector de la moda, donde apostaba básicamente por el color y los estampados llamativos para proporcionar alegría y sensación de bienestar. Trasladándola al interiorismo nos encontramos con propuestas cuya finalidad es transmitir felicidad y alegría, tanto a propietarios como a visitantes.
Olvídate de tendencias como el hygge, el minimalismo o los espacios demasiado tan modernos como impersonales y céntrate en lo que realmente te hace sentir bien a ti. Esa es la clave del estilo dopamina.
![plantas interior resistentes](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 900 900"%3E%3C/svg%3E)
Artículo relacionado
¡Al balcón!
Isabel Zúñiga
¿Qué es el estilo dopamina?
Muy popular en los últimos años, el estilo dopamina busca diseñar espacios que transmitan sensaciones positivas como la alegría y la felicidad. Para ello se apoya en la colorterapia y la combinación equilibrada de formas y elementos que aumenten la sensación de bienestar, como objetos personales de nuestra infancia, colores vivos o texturas agradables.
¿Cómo lograr el estilo dopamina?
La felicidad es un concepto subjetivo y como tal, lo que es válido para algunas personas no lo es para otras. Por eso, el estilo dopamina irradia personalidad y apela a los gustos y vivencias de quienes lo quieren adaptar. La única regla es que no hay reglas.
- Aprovecha lo que tienes. ¿Te apetece cambiar de estilo sin dejarte el sueldo? Olvídate de las tendencias efímeras que incitan al consumismo y dale una segunda vida a lo que ya tienes ¡y que además te encanta!
- Colorterapia. Empapela una pared con un estampado alegre y vivo, pinta la cómoda de tu dormitorio, cambia la funda del sofá por otra más fresca y primaveral, o aplica una mano de pintura a esas macetas de barro. Dale una oportunidad al turquesa, el fucsia y el amarillo y verás qué cambio en tu casa y en tu estado de ánimo.
- Equilibrio. Combina color y estampado pero con sentido común. Se trata de dar vitalidad a un espacio, no de recargarlo demasiado. El exceso podría derivar en un estilo ecléctico demasiado contundente.
- Recuerdos. Reconectar con la parte más amable de la infancia y la adolescencia es una forma muy sencilla de incorporar el estilo dopamina. Fotogramas de películas con un significado especial para ti, recuerdos de viajes, o creativas manifestaciones artísticas hechas por ti aportarán alegría a tu hogar.
- Vintage. Si te gustan los muebles con historia, pero no tienes un desván del que poder tirar, las tiendas de segunda mano son una buena opción. El estilo retro y el mid century de los 50 cuentan con piezas de formas suaves y redondeadas que encajan muy bien con el estilo dopamina.
- Naturaleza. El contacto con la naturaleza siempre aporta cosas buenas. Decorar con plantas de interior, cultivar hierbas aromáticas, poner flores frescas en un jarrón bonito, decorar con caracolas o piedras bonitas de colores bonitas son algunas de las formas en las que podrás notar sus efectos en tu casa.