Aunque hay indicios de que saltarse el desayuno puede ser algo positivo en cuanto a pérdida de grasa o incluso en el control de la glucemia, las personas que desayunan suelen cuidarse más y, por tanto, tener un buen estado de salud. Sin embargo, no es importante si desayunas o no, sino el qué. No es algo reservado al desayuno: es fácil entender que es más saludable no cenar que cenar una hamburguesa con patatas fritas de alguna cadena de fast food. El problema con el desayuno es que mucha gente no sabe que las galletas, los cereales azucarados o el zumo de bote no son opciones saludables.
Desayunos "fakefooder"
Los llamo “fakefooder” porque no son comida de verdad, son ultraprocesados: galletas, cereales de desayuno, cacao azucarado, zumos y batidos, pan blanco y margarina, embutidos –jamón york de baja calidad, mortadela, salami, salchichón, chorizo–. Es fácil que un desayuno esté formado solo por ultraprocesados que contienen grandes cantidades de sal, azúcar, grasas trans y grasas parcialmente hidrogenadas. Y en esta situación, es mejor no desayunar.
Huye de desayunos con reclamos como “artesano”, “rico en fibra” o “lleno de vitaminas”
Desayunos "realfooder"
Si nos apetece desayunar, hay muchos alimentos saludables que nos saciarán y nos llenarán de vitaminas y nutrientes.
- Copos de avena o centeno integrales. No tienes por qué renunciar al placer de comerte un bol de leche con cereales si optas por la avena o cereales integrales sin azucarar, que además de ser saludables son muy saciantes.
- Huevos o frutos secos. Nos aportan grasas saludables y mejoran el control del índice glucémico o la inflamación.
- Aceite de oliva, aguacate o mantequilla. Si quieres dar untuosidad a tu desayuno y llenarlo de grasas saludables apuesta por alguno de estos tres alimentos o también por cremas de frutos secos, plátano machacado...
- Yogur natural. También queso fresco batido o kéfir. Los lácteos fermentados sin azucarar son productos muy beneficiosos para nuestra salud intestinal.
- Embutido. Si vigilas que tengan más de un 90% de carne, el jamón ibérico o asado y la pechuga de pavo o pollo son complementos saludables para tu desayuno.
- Pan integral 100%. Hazlo tú con mi receta de pan de espelta. Puedes comprarlo, pero comprueba que sea 100% integral y que no lleve ni aceites refinados ni azúcar.