Los celos son una emoción compleja y ambigua, que puede tener diferentes matices y consecuencias en las relaciones de pareja. A menudo se asocian con el amor, la posesión, la inseguridad o el miedo a perder a alguien. Pero, ¿cuál es el significado de los celos y por qué se producen? ¿Sabías que no siempre son necesariamente malos?
Te desvelamos qué factores influyen en el origen y la intensidad de los celos, qué dicen de ti y qué puedes hacer para manejar los celos de forma saludable y constructiva sin que afecten a la calidad y la estabilidad de la pareja.
¿Cuál es el significado de los celos?
Los celos se definen como el temor a perder a la persona que amamos o a que nos sustituya por otra. Se trata de una reacción emocional que surge cuando percibimos una amenaza real o imaginaria a nuestra relación de pareja. Los celos pueden tener diferentes grados de intensidad, desde una leve inquietud hasta una obsesión enfermiza.
Según los psicólogos Robert Bringle y Robert Rydell, en un estudio publicado en la revista Social Behavior and Personality, establecieron dos categorías celos: los celos reactivos, que parten de componentes emocionales; y los celos de sospecha, que parten de componentes cognitivos y conductuales.
También, los celos excesivos pueden convertirse en una patología. Según el DSM-5, el 'Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales' de la Asociación Americana de Psyquiatría, la celotipia es un trastorno irreversible y multifactorial que nos hace sospechar de una infidelidad, y provoca síntomas como miedo excesivo a perder la pareja, imaginar constantemente que la pareja te engaña o sentir mucha desconfianza hacia esa persona.
No obstante, los celos no son necesariamente malos, siempre y cuando se mantengan dentro de unos límites razonables. De hecho, algunos estudios como este elaborado por la Universidad de California publicado en la revista Frontiers in Ecology and Evolution, sugieren que los celos moderados pueden tener efectos positivos, como aumentar el deseo sexual, la pasión y el compromiso en la pareja.
Sin embargo, cuando los celos se vuelven excesivos, irracionales o destructivos, pueden convertirse en un problema serio que afecta a nuestra autoestima, nuestra confianza y nuestra salud mental.
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¿Cómo afectan los celos en la pareja?
Los celos pueden tener un impacto negativo en la relación de pareja, ya que pueden generar problemas de comunicación, de confianza, de respeto, de intimidad y de satisfacción, lo que puede deteriorar la calidad y la estabilidad de la relación, haciendo que se vuelva tóxica, insana y peligrosa; y pueden poner en riesgo la salud física y mental de ambos miembros de la pareja.
Por eso, es importante aprender a gestionar los celos de forma adecuada, y buscar ayuda si los celos se vuelven un problema que nos impide disfrutar de una relación sana, feliz y segura.
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¿Por qué se siente celos?
Los celos pueden tener múltiples orígenes y factores que los influyen, pero se basan principalmente en el miedo de perder algo. Estos 5 factores te ayudarán a encontrar el origen de tus celos:
El tipo de apego
El apego es el vínculo emocional que se establece entre el bebé y sus cuidadores, y que influye en la forma de relacionarse con los demás a lo largo de la vida. Según la 'teoría del apego', desarrollada por el psicólogo británico John Bowlby, existen cuatro tipos: seguro, ansioso, evitativo y desorganizado.
Las personas con un apego seguro suelen tener relaciones estables, confiadas y satisfactorias, mientras que las personas con un apego inseguro (ansioso, evitativo o desorganizado) suelen tener relaciones inestables, desconfiadas e insatisfactorias. Las personas con un apego ansioso son las más propensas a sentir celos, ya que tienen un miedo constante a perder a su pareja y necesitan una atención y una validación constantes. Las personas con un apego evitativo suelen evitar el compromiso y la intimidad, y las personas con un apego desorganizado suelen tener relaciones caóticas, contradictorias y violentas, y pueden sentir celos por motivos irracionales o infundados.
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La autoestima
Las personas con una baja autoestima suelen tener una imagen negativa de sí mismas, y se sienten inferiores, inseguras e indignas de amor.
Estas personas suelen sentir celos porque temen que su pareja les abandone por alguien mejor, o porque se comparan constantemente con los demás y se sienten amenazadas por cualquier persona que consideren más atractiva, inteligente o exitosa que ellas. Si es tu caso, te aconsejamos interiorizar estos 8 mandamientos para mejorar tu autoestima y no volver a dudar de ti misma con el método Kaizen.
La personalidad
Algunos rasgos de personalidad pueden predisponer a sentir celos, como el neuroticismo o inestabilidad emocional, la baja tolerancia a la frustración, el perfeccionismo, el narcisismo, el control, la posesividad o la dependencia.
Estos rasgos pueden hacer que la persona sea más sensible a las amenazas, más exigente con su pareja, más desconfiada o más necesitada de afecto.
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Las experiencias previas
Las experiencias previas que hayamos tenido en nuestras relaciones de pareja pueden influir en nuestra relación actual y en la forma de sentir y expresar los celos. Si hemos sufrido una infidelidad, un abandono, una traición o una decepción por parte de nuestra pareja, es posible que desarrollemos celos como una forma de protegernos de volver a sufrir. Sin embargo, esta actitud puede ser contraproducente, ya que puede generar desconfianza, resentimiento y distancia en la relación actual.
La situación actual
La situación actual que estemos viviendo también puede afectar a nuestros celos, ya que puede aumentar o disminuir nuestra percepción de amenaza. Algunos factores que pueden influir son: el estrés, la ansiedad, la depresión, los problemas laborales, los problemas familiares, los cambios vitales, la distancia, la falta de comunicación, la rutina, el aburrimiento, la insatisfacción sexual o la falta de tiempo para la pareja.
Estos factores pueden hacer que nos sintamos más vulnerables, más inseguros o más insatisfechos con nuestra relación, y que veamos a nuestra pareja como una fuente de apoyo o de conflicto.
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¿Qué hacer en caso de celos?
Los celos son una emoción natural que todos podemos sentir en algún momento de nuestra vida, y que no tiene por qué ser negativa si sabemos gestionarla adecuadamente. Sin embargo, cuando los celos se vuelven excesivos, irracionales o destructivos, es importante buscar soluciones para superarlos y evitar que nos hagan daño. Estas son:
- Identificar y aceptar los celos. El primer paso para superar los celos es reconocer que los sentimos y aceptarlos como una emoción válida, sin negarlos, reprimirlos o justificarlos. Los celos son una señal de que algo nos preocupa o nos molesta, y que debemos atender para resolverlo. Para identificar los celos, podemos preguntarnos: ¿Qué es lo que me hace sentir celos? ¿Qué es lo que temo perder? ¿Qué es lo que me hace sentir inseguro? ¿Qué es lo que me hace desconfiar? ¿Qué es lo que me hace sentir amenazado? ¿Qué es lo que me hace sentir inferior? Estas preguntas nos pueden ayudar a entender el origen y el significado de nuestros celos, y a diferenciar entre los celos racionales (basados en hechos reales) y los celos irracionales (basados en suposiciones o fantasías).
- Expresar y comunicar los celos. Para expresar y comunicar los celos, podemos usar el método de “yo siento, yo pienso, yo quiero”, que consiste en decir cómo nos sentimos, qué pensamos y qué necesitamos. Por ejemplo: “Yo siento celos cuando te veo hablar con tu ex, yo pienso que todavía sientes algo por él o ella, yo quiero que me digas la verdad”. Este método nos permite expresar nuestros sentimientos, pensamientos y deseos de forma clara, honesta y respetuosa, sin acusar, culpar o exigir a nuestra pareja.
- Escuchar y comprender a la pareja. Sin interrumpir, juzgar o criticar. Para escuchar y comprender a la pareja, podemos usar el método de “parafrasear, resumir y validar”, que consiste en repetir con nuestras palabras lo que nuestra pareja nos ha dicho, resumir lo que hemos entendido y validar sus sentimientos, pensamientos y deseos.
- Trabajar las causas que han originado su origen. Y a partir de ahí, trabajar profundamente posibles situaciones traumáticas anteriores, por ejemplo una infidelidad, en la terapia integradora estratégica. Se puede trabajar el trauma de diferentes maneras, al igual que la autoestima, para generar un vínculo de apego seguro y puedas ver cuáles son tus cualidades. Si es necesario, también puede ser la pareja quien te ayude a desvelar tus cualidades.
Otras recomendaciones en casos de celos es pedir ayuda a un profesional, como un psicólogo o un terapeuta de pareja, como Monia Presta (moniapresta.com) y hacer una buena terapia de pareja o individual.
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