¿Cómo es una persona manipuladora?

¿Crees que alguna vez has sido víctima de una persona manipuladora? Estas personas pueden llegar a hacer mucho daño a sus parejas, amigos o familiares, dado que buscan ejercer influencia sobre el comportamiento de los demás, en busca de su propio beneficio. Por eso, te vendrá bien cómo saber si es una persona manipuladora, cómo actúa y qué trastorno puede tener para evitar relaciones tóxicas en tu vida.

Si crees que has podido encontrarte con alguien así en algún momento de tu vida, quédate. Hoy te contamos cómo es una persona manipuladora y cómo escapar de este tipo de relaciones.

¿Qué es una persona manipuladora?

Una persona manipuladora es aquella que busca controlar y modificar el comportamiento de los demás, conduciéndolos a tomar decisiones que les benefician. Las tácticas que utilizan para conseguirlo son variadas, pero todas ellas se basan en la persuasión o la seducción de su víctima.

Estas personas no tienen reparos a la hora de pedir a los demás que dejen sus necesidades de lado para satisfacer las suyas. Lo peor es que, incluso sin darte cuenta, acabas haciendo lo que ellos quieren. Por eso es tan importante aprender a detectarlos a tiempo.

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¿Cómo saber si una persona es manipuladora?

Vamos a darte cinco claves que te ayudarán a detectar a una persona manipuladora. Pero lo más importante es que confíes en tu percepción y en tus sentimientos.

Si alguien está consiguiendo con su actitud que modifiques tus decisiones en su beneficio, entonces te está manipulando. No dudes en pedir ayuda a un profesional si esta situación está empezando a resultar negativa para tu salud mental.

Detectan debilidades

Las personas manipuladoras son capaces de identificar rápidamente qué es lo que daña a los demás. Todos tenemos debilidades, cosas que te duelen o te avergüenzan. Los manipuladores lo detectan con facilidad, y lo usan en tu contra siempre que pueden.

Para conseguir esta información, te darás cuenta de que esta persona quiere saberlo todo de ti. Parece atenta, te pregunta todos los detalles de tu vida y sobre cómo te sientes. Pero no es para ayudarte ni apoyarte, sino para todo lo contrario.

Inconsistencia en su forma de actuar

Inevitablemente, estas personas acaban actuando de forma ambigua. Aseguran que se preocupan por ti, pero no es verdad, y eso tarde o temprano se acaba notando. Para mantener su control sobre ti, acabará siendo inconsistente en su forma de actuar.

Por ejemplo, un manipulador puede tratarte muy mal por algo, haciéndote sentir culpable, para luego empezar a decirte cosas bonitas con la intención de que creas que le importas.

Culpabilidad

Las personas manipuladoras hacen sentir a sus víctimas culpables. Esta es la forma más sencilla que tienen de modificar tu comportamiento en su favor.

Si cuando estás en su presencia sientes que tienes la culpa de todo, incluso de aquello de lo que no eres responsable, es posible que estés ante un manipulador emocional.

Por ejemplo, esta persona podría hacerte un comentario muy hiriente y luego justificarlo diciendo que “estás demasiado susceptible” o “eres demasiado sensible”.

La ley del silencio

El silencio puede ser un poderoso objeto de manipulación y maltrato. Si te has equivocado, este tipo de personas pueden aplicar la famosa “ley del hielo”. Te ignoran, no te responden y de esa forma hacen que tu ansiedad vaya en aumento.

Así consigue hacer de un grano de arena una montaña, lo que provoca que acabes disculpándote por algo de lo que quizá no eres responsable, buscando solucionar un problema del que el manipulador obtendrá beneficio.

Bomba de humo

También conocido como gaslighting, este método permite al manipulador fingir que nada ha ocurrido. Cuando has llegado a tu límite e intentas comunicar tus emociones a esa persona, comienza a sembrar semillas de duda en todo lo que le cuentas.

¿De verdad te trato así? ¿No te estás equivocando? Puede que tu memoria, tu percepción o tu juicio estén fallando. Utilizando sus habilidades de manipulación consiguen confundir a su víctima, eliminando todo rastro de sus errores.

¿Cómo saber si una persona te está manipulando?

Aunque saber cómo actúan y cómo son puede hacer más sencillo detectar a estas personas, lo importante es que pongas el foco en ti. ¿Estás siendo manipulada? Aquí tienes algunas claves que pueden ayudarte a averiguarlo.

• Miedo, obligación y culpa. Estas tres emociones son las favoritas de las personas manipuladoras. Las utilizan para forzarte a hacer cosas que no quieres. Si cuando estás con alguien, estos sentimientos son constantes en vuestras interacciones, no está jugando limpio contigo.
• Te cuestionas a ti mismo. Como resultado de la bomba de humo que usan muchas de estas personas, acabas dudando de tus recuerdos, sentimientos o pensamientos. Puede que, incluso, te sientas culpable de algo que ha sido error suyo. Recuerda que los manipuladores acusan, pero nunca se hacen cargo de su responsabilidad.
• Favores. Si siempre tienes la sensación de que le debes algo a esa persona, es probable que te esté manipulando. Es habitual que los manipuladores se presten fácilmente a hacer favores, de esa forma pueden utilizar la gratitud de su víctima en su propio beneficio.

Si te has sentido identificada con al menos una de estas tres señales, no dudes en buscar ayuda para escapar de esta situación. Y recuerda, este tipo de relaciones de manipulación se pueden dar en cualquier ámbito de tu vida: amor, amistad, familia, trabajo, etc.

¿Cómo salir de una relación con una persona manipuladora?

No es fácil escapar de un manipulador. Como juegan con tu autoestima y tus emociones, cuanto más tiempo lleves en esa relación, más difícil será escapar de ella. Por eso, en muchos casos, lo mejor es acudir a un profesional especializado que nos asesore y aconseje en el camino.

Por lo pronto, puedes tener en mente estos consejos:

• Tienes el poder de cambiar la situación. Aunque te sientas obligada a actuar de cierta forma, puedes decir que no. Solo necesitas las herramientas y los medios adecuados para conseguirlo. No temas pedir ayuda para salir de esta situación.
• Evita justificar sus acciones. Está bien comprender a los demás, pero justificar su forma de actuar no va a solucionar el problema. Independientemente de la razón que le haya llevado a ser una persona manipuladora, tú no eres responsable de ello. Y no te mereces pasarlo mal.
• No le des información importante. Si no tienes más remedio que seguir manteniendo una relación con esta persona, evita tener conversaciones en las que hables de asuntos relevantes. Recuerda que usará tus miedos e inseguridades en tu contra.
• Recupera tu autoestima. Quizá te encuentres en un círculo vicioso en el que crees que la aprobación de esta persona lo es todo. Pero no es cierto. Es solo el resultado de una manipulación constante. No necesitas su aprobación.
• Coloca todo en una balanza. Si estás junto a esta persona es porque en algún momento pensaste que valía la pena. Pero ahora coloca en una balanza todo lo que te hace sentir, el miedo, la culpa, la inseguridad, y pregúntate si realmente merece la pena seguir a su lado.
• Analiza tu patrón a la hora de relacionarte con los demás. Esto te ayudará a evitar volver a caer en una relación marcada por la manipulación.

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¿Cómo actúa un manipulador con su pareja?

Aunque la manipulación puede darse en muchas relaciones diferentes, es habitual que se dé dentro del romance. Las personas manipuladoras buscan a alguien empático, comprensivo y amable, dado que estas características harán que sus tácticas sean más efectivas.

Este tipo de personas controlan a sus parejas, actuando siempre en su propio beneficio. No empatizan realmente con su novio o su novia, sino que utilizan sus emociones para conseguir que actúen como lo desean.

Si estás en una relación así, puede que sientas que tu autoestima ha caído en picado. La inseguridad, la culpabilidad, el miedo y la vergüenza también son comunes en estos casos.

¿Qué es lo que más le duele a un manipulador?

Una de las debilidades más comunes de un manipulador es quedarse solo. Dependen de su red de víctimas para conseguir lo que quieren, y temen que nadie les quiera.

Por eso, si tienes que señalar el comportamiento de una persona manipuladora, puedes decirle de forma asertiva: Si continúas haciendo esto, te vas a quedar sola.

Es importante que no expliques cómo te hace sentir la situación, tan solo señálala en términos prácticos. Este tipo de frase puede poner de manifiesto que te has dado cuenta de su forma de actuar y le hará saber que, por ese camino, acabará perdiendo a las personas que le rodean.