Receta de pechuga de pollo al limón
Ingredientes:
2 pechugas de pollo
3 patatas
1 limón
2 ajos
1 ramita de salvia
Pimienta negra
Sal

Una alternativa a la típica pechuga de pollo a la plancha es esta receta de pechuga de pollo al limón con patatas asadas al horno. Una receta nutritiva y equilibrada que, al combinar la carne magra del pollo con los hidratos de carbono no refinados de las patatas, sirve como excelente plato único. Por un lado no aporta ni excesivas grasas ni calorías y, gracias al poder desengrasante del limón, ayuda a quemar grasa. Imposible resistirse.

Cómo realizarlo paso a paso

  1. Macerar las pechugas. En primer lugar, filetea las pechugas por un lado. Por otro, exprime el limón, pela y pica los ajos y prepara un macerado con ambos ingredientes. Coloca la preparación en un cuenco u otro recipiente y deja macerar en ella, durante al menos media hora, las pechugas previamente salpimentadas.
  2. Preparar el asado. Primero, pela las patatas y córtalas en rodajas no muy gruesas. Luego, engrasa una fuente refractaria con unas gotas de aceite y ve intercalando las rodajas de patata con los filetes de pollo y las hojas de salvia lavada.
  3. Hornear el plato. Antes que nada, precalienta el horno a 200 grados. Mientras se calienta, rocía bien con el jugo de la maceración los montaditos de pollo y patatas que has dispuesto en la fuente. Y por último, mete la fuente en la parte media del horno y deja asar durante una media hora más o menos.

TrucoClara

Cocción en su punto

El tiempo de cocción puede variar de un horno a otro. Para asegurarte de que el plato esté en su punto, verifica que esté listo pinchando con un cuchillo fino las patatas y que salga limpio.

Pero, si lo que quieres es acelerar el asado o evitar que la pechuga quede muy seca, antes de añadir las patatas a la fuente del horno puedes cocerlas un poco en agua hirviendo.

Limón, un eficaz quemagrasa

El limón, como el resto de cítricos, es un alimento termogénico. Es decir, acelera tu metabolismo y te ayudan a quemar más calorías. Además, por su alto contenido en vitamina C reduce el desequilibrio de insulina, condición indispensable para que se puedan quemar las grasas.

Ahora bien, si le quieres sacar el máximo partido a su efecto quemagrasa, no te limites a añadirlo a las comidas. Al levantarte, puedes tomar un vaso de agua tibia con su zumo en ayunas y esperar 30 minutos a desayunar. Además de quemagrasa, es un potente antioxidante y desintoxicante.