Eugenia Osborne, la madre de comunión más guapa y original con un romántico vestido cut out

Eugenia Osborne ha vivido este fin de semana uno de los días más especiales y es que su familia ha ido de comunión múltiple. "Hemos celebrado la comunión de mis sobrinos Fausto y Valentina y de mis hijos Juan y Sandra. Toda la familia hemos podido compartir con ellos todo nuestro de cariño y alegría", ha escrito la influencer en Instagram junto a un par de fotografías de su lookazo. Eugenia ha confiado en la firma española de moda entre las invitadas, The IQ Collection, y ha lucido estilismo de madre de comunión más original (y bonito) de la primavera.

Es el típico vestido que no pasa desapercibido por su silueta elegante y favorecedora. Largo midi, media manga con maxivolumen, escote en V que estiliza y lo más llamativo un amplio escote en la espalda con detalles cut out que hace muy muy fina la cintura. Sí, los vestidos con aberturas también puede ser muy elegantes.

El aire campestre, naif y romántico lo pone la falda, muy años 60, en línea A y con originales fruncidos. Nos encantan los colores, blanco roto y azul pastel, que tanto rejuvenecen. Es una pieza especial, por su silueta y su trabajado patrón, que no necesita nada más -ni complementos, ni un súper peinado ni el maquillaje más elaborado- ya que se lleva todo el protagonismo.

El vestido de Eugenia Osborne pertenece a la colección Primavera-Verano 2022 y sigue disponible en la web de la firma en todas las tallas. Su precio es 380 euros. La firma de Inés Domecq se ha convertido en la favorita entre las mujeres de la aristrocracia y las celebrities españolas. Desde Letizia hasta Eva González o Tana Rivera han vestido modelos de la firma española, cuyos vestidos de invitada se caracterizan por sus volúmenes y siluetas favorecedoras y ultra femeninas. La propia Eugenia Osborne ha vestido de la firma en más ocasiones y siempre con éxito absoluto.

Lo mejor es que es un vestido que podrá reciclar en distintos eventos con otro calzado, por ejemplo con unas bailarinas planas súper coquetas y cuando llegue septiembre, por qué no, con unas botas camperas.