Además de estar comprobado que el aguacate ayuda a adelgazar gracias a su poder saciante, se considera que las personas que comen aguacate de forma habitual suelen seguir una dieta más sana, pesan menos y tienen mejor salud. Y una forma de hacerlo es comerlo por la mañana como en estos desayunos que te proponemos. Tostadas con hummus de remolacha Los desayunos con aguacate no tienen ningún misterio. Es tan sencillo como lo que ves. Sobre unas tostadas pon hummus de remolacha (o el clásico hummus de garbanzos también) y encima láminas de aguacate, tomatitos, algún brote tierno y lo aliñas al gusto. Pan con guacamole, huevo cocido y nueces Si quieres un desayuno contundente y lleno de energía, ten en cuenta que el aguacate también combina súper bien con huevo, que está lleno de proteínas saludables. Unta una rebanada de pan con guacamole (o si no tienes con aguacate aplastado con un tenedor), y encima pones un huevo cocido o pasado por agua. Y lo completas con nueces y semillas. Aquí tienes más desayunos saludables. Pan con aguacate, lentejas, tomate y albahaca Del mismo modo que casa muy bien con el hummus de garbanzos, también lo puedes combinar con cualquiera de las energéticas legumbres, y así empiezas el día con la batería a tope. Sobre unas rebanadas de pan de hogaza, puedes poner láminas de aguacate, lentejas cocidas, rodajas de tomate y unas hojas de albahaca fresca, por ejemplo. Apetece, ¿verdad? Bocadillo vegetal con huevo duro Si eres de las que no puedes prescindir del bocadillo para desayunar, pero buscas una versión más saludable, prueba este. Lleva aguacate, lechuga, tomate, cebolla y huevo cocido. Pero también quedaría riquísimo con queso fresco, por ejemplo. Así evitas los embutidos, que engordan bastante y, al ser alimentos procesados, no son saludables. Aguacate relleno de huevo y bacon Otro desayuno contundente (que incluso te podría servir como cena rápida ). Dora el bacon. Corta el aguacate por la mitad y quita el hueso. Agranda el hueco retirando un poco de pulpa y resérvala para otro desayuno. Luego, coloca el aguacate en una fuente refractaria con una base de sal gorda para que no se vuelque. Casca un huevo en el hueco, distribuye encima bacon y mozzarella, y hornea a 180º 12-15 min (hasta que el huevo se cuaje). Pita con guacamole, tomate y germinados Una prueba clarísima de que los bocatas saludables ni son sosos ni difíciles de hacer. Para hacer este desayuno, solo tienes que coger pan de pita, y rellenarlo con guacamole, y rodajas de tomate. Y para darle un toque más sofisticado, añade al relleno unos brotes germinados, que lo hacen mucho más apetecible. Es uno de los bocadillos fáciles, saludables y con un toque gourmet. Aguacate con germinados Un clásico de los desayunos con aguacate fáciles y rápidos es cortarlo en láminas y combinarlo con germinados. Lo puedes tomar tal cual o servirlo sobre tostaditas y, como aquí, acompañarlo con un yogur con muesli o algún cereal. Si te gusta la idea, prueba alguno de nuestros desayunos con avena. Tortitas de arroz con paté de aguacate Si buscas un desayuno con aguacate que sea fácil, rápido y saciante (pero no muy pesado), prueba este. Sobre unas tortitas de arroz pon paté de aguacate, guacamole (que puedes tener ya hechos), o simplemente aguacate aplastado con un tenedor, y lo aderezas al gusto. Los 5 desayunos con aguacate más socorridos Tostadas con láminas de aguacate y germinados. Aguacate relleno de huevo y bacon. Rebanadas de pan con guacamole y queso fresco. Bocadillo vegetal con aguacate y huevo duro. Tortitas con paté de aguacate o aguacate aplastado. Cómo pelarlo, cortarlo y vaciarlo Sin quitar la piel, realiza un corte a lo largo, hasta que el cuchillo llegue al hueso. Luego, coge de cada lado con una mano y gira suavemente en dirección contraria para que el hueso se despegue. Por últimao, vacíalo con una cuchara o un cortador de aguacate. Trucos para sacarle partido Para evitar que se ennegrezca por culpa de la oxidación, una vez pelado, rocíalo con un poco de zumo de limón. Si quieres conservarlo una vez cortado por la mitad, envuélvelo en film de cocina tocando la pulpa, y guárdalo en la parte más fría de la nevera para frenar la maduración. La pulpa la puedes congelar triturada o aplastada y aderezada con zumo de limón. Y si te ha salido verde y quieres madurarlo, descubre aquí tres métodos infalibles.