Aunque no lo creas, llevas comiendo hummus más tiempo del que imaginas. ¿Te acuerdas de cuando eras pequeña y tu madre aplastaba los garbanzos del cocido con un tenedor? Pues por ahí van los tiros. El hummus no es más que un puré de garbanzos con algo de magia que lo convierte en un plato sencillo, fácil de hacer y muy sano. Y gracias a nuestra receta, de lo más ligero.
El plato tradicional se hace con garbanzos, tahini, aceite de oliva, ajo y especias. Nuestra versión es una receta de hummus más ligera porque la cantidad de tahini se reduce mucho y hemos cambiado el aceite de oliva por un yogur griego. Toma nota ¡y cuéntanos qué te parece!
Ingredientes de la receta de hummus:
- 1 cucharada de tahini (crema de sésamo)
- 1 bote de 400g de garbanzos cocidos
- Yogur griego
- Medio limón
- 1 diente de ajo
- Comino molido
- Pimentón dulce o picante
- Aceitunas negras
¿Por qué es tan bueno comer hummus?
Es un plato que resuelve varios problemas a la vez:
- Receta rápida. Coger un recipiente, añadir los ingredientes, triturar y servir.
- Plato socorrido. ¿Sin nada en la nevera? Tranquila, mira en tu despensa y seguro que aparece un bote de garbanzos cocidos. Tener tahini no es tan habitual… pero también puedes moler tú misma el sésamo.
- Muy sano. Si algo cuesta es comer las 3 raciones de legumbres semanales recomendadas. Cuando me esfuerzo mucho, mucho me salen dos… y creo que no soy la única. El hummus soluciona este problema. ¡Alehop! Ración de legumbres en plan cena familiar de picoteo.
- Rico en proteínas vegetales. Si quieres seguir una dieta vegetariana o simplemente deseas incorporar más proteínas vegetales a tu dieta habitual, el hummus puede ser tu solución.
- Cocina para todos. Los niños se lo pasan pipa mojando los nachos en el hummus. Las personas con estómago delicado toleran muy bien esta receta (y aún mejor sin el ajo). Es un plato vegetariano, sin gluten y apto para intolerantes a la lactosa si usas un yogur sin lactosa en lugar del griego. ¿Quién da más?
- Y tus huesos… Van a hacer la ola gracias a la dosis extra de calcio que recibirán de la mano de los garbanzos, el yogur y el sésamo.
¿Sabías que...?
Los garbanzos, como la carne, los huevos y el pescado, pertenecen a la categoría de los alimentos proteínicos, con la ventaja de que están casi libres de grasas. Además contienen en torno a 15 g de fibra por cada 100 g en seco, por lo que evitan el estreñimiento y favorecen la salud de la flora intestinal, importante para evitar la obesidad y para aumentar las defensas.
¿Quieres ver nuestra versión ligera de la ensaladilla rusa?