¿Cuántas veces estás en casa por la tarde y piensas, "¿y ahora qué hago de cenar"? A mí me pasa día sí, día también. Cuando no era madre todo era más fácil: cocinaba algo a la plancha y lo complementaba con una ensalada de bolsa tuneada. Ahora tengo un hijo pequeño con mucha hambre y un paladar cada vez más exigente.
Si buscas ideas de cenas para toda la familia que sean sanas, apetitosas y fáciles de hacer, voy a proponerte unas cuantas. Ah, y rápidas, porque tampoco es cuestión de pasarse dos horas en la cocina, ¿no? Son aptas para adultos, adolescentes y niños de cualquier edad (a partir de un año y que estén acostumbrados a comer a trozos, eso sí).
Las claves de una cena familiar saludable
Una manera fácil de conseguir que tus platos siempre sean saludables es utilizar el Método del Plato de Harvard. Es decir, que la mitad del plato esté formado por vegetales; un cuarto, por hidratos preferiblemente integrales; y el otro cuarto, por proteína saludable.
El postre debería ser siempre fruta o lácteo natural sin azúcar (yogur, queso fresco, cuajada, kéfir...). Si tu familia o tú acompañáis la comida con pan, intentad que sea integral y de buena calidad.
Cuando la familia crece, los gastos aumentan y no está de más optar por alimentos asequibles. Compra la verdura y la fruta de temporada, que siempre sale mucho mejor de precio y además es más sostenible. No prescindas del pescado porque es caro: hay opciones baratas y muy saludables: bacalao fresco, sardinas o boquerones, jurel, maira, caballa, palometa...
Planificar tus menús semanales es otra de las claves para ahorrar tiempo y dinero. Evitarás improvisar y acabar tirando de precocinados.
Aquí tienes ideas de cenas para toda la familia sanas, fáciles y que gustarán a todos.