Aunque las mechas son la mejor opción para las que buscan refrescar el color de su melena con un acabado natural y un mantenimiento menos sacrificado, el tinte sigue siendo una opción mayoritaria para las que quieren cambiar o matizar su color de pelo, así como ocultar las canas. Incluso dentro de los tintes, aunque los sintéticos son los más usados, muchas buscan una alternativa a las coloraciones químicas permanentes más natural y respetuosa.
Si eres de las que prefiere este tipo de opciones, debes saber que, según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), no son tan naturales como dicen ser, ni su eficacia resulta comparable a la de los tintes químicos tradicionales. Esto es lo que debes saber...
Gtres
Cómo son (de verdad) los tintes naturales
Se trata de coloraciones que se presentan como más respetuosas con el cabello y que se suelen asociar con extractos naturales y plantas. "En realidad, en su gran mayoría son coloraciones químicas permanentes que encontramos sobre todo en grandes superficies, aunque también en herbolarios y farmacias", señalan.
Suelen ser tintes que prescinden en sus fórmulas del amoniaco –que sustituyen por otro agente alcalino como la etanolamina– y que a menudo incorporan aceites e ingredientes vegetales que protegen el cabello. Eso sí, siguen basando su acción colorante en el agua oxigenada y los colorantes de oxidación. Aunque, según la OCU, para asociarse con un concepto de más natural, sano y seguro –por tanto, más beneficioso para el que lo usa– tienden a usar nombres, prefijos y dibujos en los envases que evocan la naturaleza. En otras palabras, es más una cuestión de marketing que de formulación...
Además, la organización de consumidores señala que la oferta de coloraciones naturales para el cabello es bastante limitada, ya que "apenas existen plantas con propiedades tintóreas".
Henna: el verdadero tinte natural
Lo cierto es que si de verdad buscas una coloración natural para teñir tu melena, la henna es la mejor opción, aunque debes saber que tiene una serie de inconvenientes respecto a los tintes tradicionales, según apunta esta organización de consumidores:
- Efecto semipermanente: la henna dura un máximo de 8 semanas –cuando, por otra parte, tendrías más o menos que visitar la peluquería de nuevo para actualizar tus raíces–.
- Hay que preparar la mezcla: de forma casera, hay que mezclar el polvo con agua hirviendo y dejarlo enfriar antes de aplicarlo.
- No permiten aclarar: según la OCU, la henna "no permite aclarar el cabello y ofrece una limitada gama de colores: oscuros y rojizos". Esto limita su uso a las mujeres con cabellos en estos colores.
- Es difícil acertar con el tono: sobre todo, si el cabello ha sido teñido anteriormente con tinte químico. "Lo mismo pasa al contrario, cuando se quiere aplicar un tinte químico después de una coloración con henna", señala la OCU.
- Ni canas ni rubios: "La henna no se recomienda para cabellos canos o rubios porque el tono final puede tirar a verde", explican desde la OCU.
- Vegetal, no inocuo: aunque la henna es natural, no significa que no pueda producir alergias –que puede ser uno de los motivos por los que se eviten las coloraciones tradicionales. "La henna negra, utilizada para tatuajes temporales: contiene parafenilendiamina, que puede producir alergias graves y sensibilizaciones cutáneas", advierte la entidad.
Por último, la OCU señala que si quieres saber si una coloración está hecha 100% de henna o no, debes buscar el nombre lawsonia inermis en el listado de ingredientes.