Si eres fan de las recetas saludables, el brócoli es un ingrediente que no debería faltar en tu repertorio. Contiene mucha fibra, minerales y vitaminas, en concreto es una buena fuente de vitamina C. También es fuente de potasio, que contribuye al funcionamiento normal del sistema nervioso y de los músculos, y de azufre, responsable de sus propiedades antimicrobianas e insecticidas (y del olor que desprende mientras se cuece). 

Aunque solemos pensar en él como un alimento para tomar caliente, lo cierto es que da mucho juego en ensalada. Es ligero, digestivo, puedes tomarlo con una sencilla vinagreta y ¡no tarda nada en hacerse! ¿Tienes dudas? Pues sigue leyendo porque, además de contarte unos trucos para sacarle partido, al final del artículo encontrarás varias recetas de ensaladas que vas a querer probar enseguida.

Así puedes evitar el mal olor al cocer el brócoli

Ahora que sabes que el azufre es el responsable del mal olor que desprende el brócoli al cocerse, quizá pienses que no te queda otro remedio que resignarte. Pues no, porque aquí tienes un truco que te ayudará a reducirlo bastante: cuando introduzcas el brócoli en el agua hirviendo para cocerlo, acompáñalo de tres rodajas de limón. ¡Y listo!

Esta es la forma más sencilla de hacer el brócoli

Una vez tengas el brócoli bien limpio, sin tallo y separado en ramitos, puedes cocerlo o hacerlo al microondas, procurando siempre no pasarte con el tiempo de cocción. Por lo general, si lo cueces en un cazo con agua, lo tendrás en unos 4 minutos (dependiendo del tamaño de los ramitos),  mientras que el micro tapado con film tardará menos de 3. Combínalo con uno o dos ingredientes más y alíñalo con un buen aceite y ajo.

Ahora que ya sabes cómo cocinar el brócoli, ponte manos a la obra y escoge la primera de las recetas de ensalada que vas a preparar.