a flor de piel

Cómo saber si eres una Persona Altamente Sensible

Lloras por todo. Ruidos y luces fuertes te dejan totalmente fuera de juego. Sientes dolor extremo con el mínimo golpe. Podrías ser lo que se conoce como una PAS. ¡Descúbrelo!

Carme del Vado

Redactora Jefe de CLARA.

22 de enero de 2019, 16:46

Las conocidas como Personas Altamente Sensibles (PAS) cuentan con una capacidad sensorial y perceptiva más desarrollada que las hace más sensibles al mundo que las rodea. Podríamos decir que viven la vida a flor de piel. Una intensidad que puede llegar a ser abrumadora para ellas por un exceso de información y que las puede llevar a saturarse e, incluso, sufrir ataques de estrés y ponerse enfermas si no saben gestionar toda la información. Con esta descripción pueden sonar a personas frágiles o vulnerables y nos puede venir a la cabeza la imagen de una persona llorona o siempre a la defensiva. No se trata de eso. La PAS vive el mundo con más intensidad lo que, en muchas ocasiones, le permite ver y percibir cosas que los demás no pueden.

Las Personas Altamente Sensibles viven la vida a flor de piel

Esta hipersensibilidad va unida en muchas ocasiones a la creatividad y es que un gran número de artistas pueden ser identificados como PAS. El arte no se lleva en exclusiva a este tipo de personas, ya que están presentes en todas las profesiones y suponen aproximadamente el 20% de la población. Quizá nosotras mismas hemos notado que sufrimos, sentimos, reímos o lloramos de forma diferente a nuestras amigas o familiares. Puede ser que estemos ante un caso de alta sensibilidad, uno de los conceptos que estableció Elaine Aron hace más de treinta años. Una psicóloga norteamericana que ha centrado toda su actividad en las PAS o HSP (del inglés Highly Sensitive Person) como se puede ver en su página web.

¿Cómo es una Persona Altamente Sensible?

Muy en la onda de las personas con alta sensibilidad, la doctora Aron quiso comprenderse mejor a ella misma y los motivos por los que sentía lo que sentía. En este afán de entender, acabó descubriendo la existencia de este tipo de personas que comparten el rasgo que ella llamó “Alta Sensibilidad”. A partir de este primer descubrimiento, empezó a hacer estudios y acabó identificando los rasgos que definen a estas personas. Empezó por cuatro pilares que se deben cumplir para poder identificar a la persona como altamente sensible.

  1. Análisis profundo. Las personas altamente sensibles reciben mucha información pero, también, la suelen masticar más. Le dan muchas vueltas a cualquier tema y profundizan en él.
  2. Tendencia a la saturación. Especialmente cuando los estímulos sensoriales como ruidos y luces se tiene que compaginar con otros más emocionales, especialmente enfados, desengaños o disgustos. Además, se asustan con facilidad y las escenas de violencia les ofenden más.
  3. Empatía y conexión. Viven todas las historias personales como si fueran los minutos finales de La vida es bella. Se emocionan con facilidad ante situaciones y sensaciones. Conectan a un nivel muy profundo con las artes y la música.
  4. Percepción aguda. Captan los humores de la gente y las energías que desprenden. Reciben más información que el resto. Lo que ya hemos establecido como el "sentido arácnido" que les permite ver lo que pasa y saber qué movimientos hacer para que mejore la situación.

¿Qué puedo hacer si soy una Persona Altamente Sensible?

El rasgo de la alta sensibilidad todavía es poco conocido, a pesar de ser descubierto en los años 90. Hasta este descubrimiento, el comportamiento de una personas PAS se había englobado dentro de las conductas relacionadas con los trastornos mentales o emocionales. Este tipo de persona, en muchas ocasiones, sufre por ser tan sensible ya que todo le afecta y, si no sabe identificar lo que le pasa, se puede llegar a sentir incomprendida y aislarse.

Para poder llevar una vida plena y saber gestionar las emociones extremas que sienten, las Personas Altamente Sensibles pueden tener en cuenta una serie de factores y consejos que mejorarán su día a día y que les llevarán a vivir una vida más plena.

  • Autoconocimiento. Primero de todo, asumir que no están enfermas. Experimentan el mundo de forma diferente y deben asumir y abrazar esta característica. Es bueno conocerse a una misma, y para ellas especialmente. Buscar patrones en su comportamiento, saber qué situaciones se convierten en detonantes de un posible episodio de estrés.
  • Controlar los estímulos. Por su sistema nervioso más refinado, toleran peor el alcohol y tienen que tomar menos medicamentos que la mayoría. Es bueno, pues, que vigilen lo que consumen. Deben controlar, también, su exposición a conversaciones y actividades en grupo que les puedan saturar.
  • El arte es el camino. La expresión artística es una de las mejores vías de expresión y terapia para las Personas Altamente Sensibles. Pintar, tocar un instrumento o cantar les permite expresar lo que sienten de formas diferentes y eso puede evitar su saturación. Hacer algún ejercicio suave o practicar la meditación y el mindfulness al aire libre, así como hacer trabajos de respiración, también pueden ayudar.

Para poder compartir experiencias y herramientas como las que acabamos de repasar, en el año 2014 se fundó la Asociación de Personas con Alta Sensibilidad de España (APASE) que ofrece, entre otros muchos servicios, un directorio de profesionales en todo tipo de disciplinas (médicos, psicólogos, coach, dentistas) entrenados en el trato con personas PAS.

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