España es uno de los países europeos donde más días de sol tenemos. Aunque esto es una ventaja para nuestro bienestar, también es un peligro para nuestra salud cutánea si no nos cuidamos como es debido. En un contexto en el que el cáncer de piel y el envejecimiento cutáneo prematuro continúan en aumento, es urgente conocer cómo protegernos de los riesgos de la exposición solar, al mismo tiempo que disfrutamos de sus beneficios.
No hay mejor forma de resolver todas nuestras dudas, que hablando con un experto. El Dr. Juan García Gavín, dermatólogo experto y una de las voces más autorizadas en España en materia de fotoprotección, ha sido el encargado de dar voz a esta problemática a través de su experiencia clínica y su participación activa en la investigación dermatológica. Además, colabora con la conocida marca Rilastil en el desarrollo de Dermaprotect SPF50+, un fotoprotector que no solo protege, sino que también repara y mejora la salud cutánea.
El sol: un aliado con doble filo
La exposición solar, explica el Dr. Gavín, tiene un doble rostro. Por un lado, es cierto que activa la producción de vitamina D, mejora el estado de ánimo y regula el ritmo circadiano. Pero por otro, si no se gestiona de forma adecuada, puede provocar daños irreversibles. “La radiación ultravioleta es el principal factor de envejecimiento cutáneo y cáncer de piel. La clave está en cómo y cuándo nos exponemos al sol”, advierte el experto.
Lo que tenemos que tener claro es que el daño solar no es inmediato, sino acumulativo, y muchas veces invisible durante años, lo que dificulta la toma de conciencia real sobre sus efectos. La paradoja, según el doctor, es que los beneficios del sol se alcanzan con exposiciones moderadas y controladas, mientras que los perjuicios se producen cuando estamos más de la cuenta.
Lo que tenemos que tener claro es que sí que se puede disfrutar del sol de forma segura, pero eso significa implica integrar una rutina de fotoprotección diaria adaptada al tipo de piel, al entorno y a la intensidad de los rayos UV, algo que todavía no está generalizado entre la población española, según asegura el experto.
¿Los daños del sol tienen vuelta atrás?
Una de las grandes preocupaciones de quienes han sufrido quemaduras o una exposición prolongada es saber si es posible revertir los daños solares. El Dr. Gavín aclara que algunos efectos, como la inflamación o el estrés oxidativo, pueden tratarse y aliviarse con activos calmantes o antioxidantes. No obstante, insiste en que hay otros, como el daño actínico o las mutaciones celulares, que son acumulativos e irreversibles. “Por eso la prevención debe comenzar antes de que el daño se produzca”, subraya.
La piel es el órgano más grande del cuerpo, y que además tiene memoria, por lo que cada quemadura solar suma. Aunque los tratamientos dermocosméticos y médicos pueden mejorar el aspecto de la piel, no eliminan el riesgo acumulado. De ahí la importancia de proteger la piel a diario, incluso en esos días en los que no hace sol o no estamos muy expuestos, ya que también puede incidir en nuestra piel.
Fotoprotección en España: un hábito en construcción
Si bien la concienciación sobre los efectos del sol ha mejorado en los últimos años, los hábitos de fotoprotección en España siguen siendo inconsistentes. “Vivimos en un país con muchas horas de sol y vida social al aire libre, pero no siempre adaptamos la protección a nuestras actividades ni al clima”, explica el Dr. Gavín. Lo que más cuesta es reaplicar el protector solar, o atender esas zonas a las que no le damos tanta importancia como orejas, labios o el cuero cabelludo.
Para el dermatólogo, el conocimiento es la mejor herramienta de prevención. Evitar la exposición en las horas centrales del día, usar ropa adecuada, buscar la sombra y aplicar fotoprotección de amplio espectro son medidas que deberían integrarse como parte del cuidado personal diario. “Disfrutar del sol es perfectamente compatible con cuidarse, solo hay que saber cómo hacerlo”, concluye.
Dermaprotect SPF50+: una nueva generación de fotoprotección
La colaboración entre Rilastil y un equipo de dermatólogos liderado por el Dr. Gavín ha dado como fruto Dermaprotect SPF50+, una fórmula desarrollada pensando en pieles reales, muchas de ellas con patologías o en tratamiento dermatológico. Cuenta con una textura súper ligera y de rápida absorción, algo que se agradece en este tipo de productos.
Rilastil
¿Lo más destacable? Que va más allá de la barrera solar: potencia la defensa natural de la piel, aumenta su hidratación en más de un 30%, refuerza la función barrera, ofrece una potente acción antioxidante, calma y repara el daño solar, incluso a nivel del ADN celular. Para el Dr. Gavín, lo más importante en un buen fotoprotector es su tolerancia cutánea: “Debe ser eficaz, pero también agradable de usar. Que no irrite, no engrase y se adapte a todas las pieles, incluso las más sensibles. La experiencia de uso es clave para garantizar la constancia en su aplicación”.
La clave está en entender que prevenir es siempre mejor que tratar. Porque, aunque el sol sea fuente de vida y bienestar, su exceso es también una de las principales amenazas para nuestra salud cutánea. Y como bien señala el Dr. Gavín: “Disfrutar del sol no está reñido con cuidarse. Solo hay que hacerlo con conocimiento y con los productos adecuados”.