Charlize Theron (49 años) estaba llamada a convertirse en modelo y bailarina de ballet, pero el destino trunco sus planes. Una lesión de rodilla la impidió continuar con su carrera, así que se enfocó en ser actriz. Menos mal porque lo que se hubiese perdido el mundo de la interpretación y la moda. Debutó con un pequeño papel en el cine y alcanzó la fama en la década de 1990 con películas como 'El abogado del diablo', 'Mi gran amigo Joe' y 'Las normas de la casa de la sidra' para después hacer interpretaciones en 'Monster' o 'Fast & Furious'.
A lo largo de su dilatada carrera y con un Oscar y un Globo de Oro en su currículum, Charlize Theron ha interpretado numerosos papeles que le han llevado a tener que hacer modificaciones en su cuerpo y en sus estilismos. Nunca le ha importado engordar para dar vida a un personaje, pero con los años cada vez le costaba más volver a sus kilos habituales. Así lo confesó la propia actriz en una entrevista con InStyle.
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El coste de los cambios físicos de Charlize Theron
Uno de los más radicales lo hizo para la película que le valió el Oscar a Mejor Actriz en 2004, 'Monster'. "Nunca, nunca volveré a hacer una película y diré: 'Sí, ganaré 18 kilos'. Nunca lo volveré a hacer porque no puedes quitártelos", dijo la veterana actriz de origen sudafricano.
Y añadía: "Cuando tenía 27 años, hice 'Monster'. Perdí casi 14 kilos, como, de la noche a la mañana. Me perdí tres comidas y volví a mi peso normal. Luego lo hice a los 43 para 'Tully', y recuerdo que un año después de intentar perder peso, llamé a mi médico y le dije: 'Creo que me estoy muriendo porque no puedo perder este peso'. Y él estaba como, 'tienes más de 40 años. Cálmate. Tu metabolismo no es lo que era'. Nadie quiere escuchar eso".
En esta misma entrevista, Charlize Theron confesaba también que siempre le ha hecho mucha gracia ganar peso para sus películas y luego tener que desfilar por una alfombra roja.
El mayor error de belleza de Charlize Theron
Del mismo modo que ha evolucionado su carrera, también sus estilismos a lo largo de estos años en los que se inició en el mundo de la interpretación. Es una mujer que derrocha estilo por los cuatro costados con looks de infarto, pero no siempre ha acertado a la hora de hacerse un peinado nuevo o un cambio en su rostro. De hecho, una de las cosas que más se arrepiente fue sin duda seguir una tendencia que por aquel entonces estaba de moda. "Sin lugar a dudas me arrepiento de las cejas finas de los años 90. Todavía me estoy recuperando de eso", confesaba. Es cierto que ahora está más de tendencia que nunca, pero tiene muy claro que no volvería a pasar por esto.
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Ese pequeño error estilístico no le ha impedido convertirse en todo un icono de estilo y de belleza. Cuida al máximo su cuerpo y su piel (como con el uso de protectores solares) porque sabe que no importa la edad que tenga porque el paso del tiempo es inevitable. Cuanto más cuide el cutis, mejor envejecerá y no hay duda de que la actriz aún goza de una piel perfecta.