¡se puede!

Cómo ser más positiva de forma fácil

Voy a explicarte cómo eliminar de nuestra mente la terribilitis para vivir la vida desde una perspectiva mucho más positiva.

Rafael Santandreu

Psicólogo y autor del libro "Sin Miedo".

17 de octubre de 2019, 07:26

Muchas ya conocéis lo que llamo “terribilizar”. Para quienes no, la “terribilitis” es lo que llamo la madre de todas las enfermedades. Es cuando nos decimos que cualquier cosa, cualquier adversidad que nos pase, es terrible. Y que, además, no lo podremos soportar.

Al terribilizar, no tenemos control de nuestro pensamiento

Claro, si realmente pensamos así y nos lo creemos, tiene sentido que estemos convencidos de que hay cosas terribles y que estamos a merced de los acontecimientos. He tenido muchos pacientes que venían a consulta pidiendo un diagnóstico para lo que les estaba pasando: “¿Soy hipocondríaco? ¿Tengo depresión? ¿Es un TOC?”. Y yo siempre les decía lo mismo: “Déjate de rollos, ¡lo que tienes es terribilitis! Así que... ¡manos a la obra!”.

Si terribilizas partes de la base equivocada

Terribilizar es creerse que lo que nos sucede es tan grave que no podremos soportarlo. Este es un planteamiento equivocado. La verdad ya la decía el gran filósofo Epicteto, no es lo que nos pasa, sino cómo interpretamos lo que nos pasa. Muchos podéis pensar que hay situaciones verdaderamente terribles: quedarse sin trabajo, separarse, tener una enfermedad grave, perder a un ser querido... y yo digo que no. Es muy cierto que hay situaciones duras, complejas, inesperadas, pero no terribles.

Si nos lo contamos así, como que sea lo que sea que nos pase es insoportable y durísimo, así lo viviremos, así nos afectará. La clave es armarse de una buena filosofía verdadera de vida. No es darse mensajes positivos o rosas, ni repetirse frases como un loro, sino creérselo de verdad. Una revolución interna.

Cambia tus creencias y haz tu revolución interna

¿Cómo podemos cambiar esa creencia? Te voy a dar unas sencillas y potentes instrucciones, pero antes quiero que conozcas a dos personas reales, con situaciones muy complicadas, que viven con una filosofía a prueba de bombas. Daniel Stix nació con cáncer y tuvo daños irreparables, uno de ellos afectó a su movilidad. Va en silla de ruedas. En 2016 ganó la plata en los Paralímpicos de Brasil. Desde su infancia se ha ido construyendo una mente fuerte y clara. La silla, lejos de frenarle, le ha dado fuerza.

Otro ejemplo es Ana Amalia Barbosa, profesora de niños con discapacidad. Ana escribe libros, es investigadora y ha hecho la tesis escribiendo con su barbilla porque es tetrapléjica.

Pasos para ser más positiva

Las personas que no terribilizan o que tienen una mente racional y fuerte dominan su diálogo interno, saben manejar sus pensamientos. Como el que es bilingüe.

  1. Muchas veces nos quejamos de tonterías,que si hace calor, que si hay tráfico... ¡Bobadas! Una mente fuerte pensaría: ¡Qué bien, hace sol!
  2. Preguntarte siempre que te suceda una adversidad lo siguiente: “Esto que me ha pasado, ¿en qué medida me impide hacer cosas valiosas para mí o para los demás?”. Podemos pensar: “¿Qué me dirían Daniel o Ana Amalia sobre esto?”. Siempre podemos construir un entorno valioso. Seguro que tú, a lo largo de tu vida, has hecho cambios tras pasar por situaciones adversas.
  3. Trabajaremos con perseverancia nuestras creencias limitantes, iremos al origen de los miedos y crearemos creencias realistas, fuertes y sanas. Para creerse que de verdad todo lo podemos superar, hay que superarse. Flexibiliza tu mente, hazla elástica y determinada.
  4. Tenlo claro: nada es tan terrible. Cada uno elige el discurso interno que se da ante las dificultades. Lo que me digo, lo que me estoy contando ante esto, ¿me hace más fuerte? ¿Me ayuda o me hace más débil?
  5. Recordemos: todos nacemos con gran predisposición a la felicidad. A lo largo del aprendizaje de la vida, adoptamos un discurso u otro. La gran noticia es que podemos aprender de nuevo y darle la vuelta como a un calcetín.

Claves para no terribilizar

  • Tú eres dueña de tu mente. Piensa: Nada es terrible; necesito muy poco para ser feliz. Solo agua y comida.
  • No necesitas extras para ser feliz. Aquí llega la “necesititis”: necesito un trabajo, un novio, un móvil...
  • Hay que vivir sin “necesititis”. Sin ellas, el mundo es mucho más sencillo, y la vida, también. La felicidad se construye desde dentro de uno mismo.

Más Sobre...

Cómo ser feliz
Rechazar y suscribirse

Si quieres actualizar tus preferencias de consentimiento haz click en el siguiente enlace