Seguro que, en más de una ocasión, has dicho aquello de “me lo puedo permitir, porque después voy al gimnasio” asociando tu ingesta alimenticia a la posterior quema de energía en el gimnasio. Pero, querida lectora, sentimos decirte que esta asociación que los especialistas llaman “compensación” dista mucho de la realidad y puede ser mucho más grave y perjudicial para ti de lo que consideras. 

Como explica la farmacéutica especializada en nutrición, Boticaria García, “utilizar el ejercicio para quemar excesos no tiene sentido. No solo no es efectivo, sino que además puede generar un trastorno de la conducta alimentaria.” Y es que, asociar el deporte únicamente con la quema de calorías o como motor para adelgazar, ni es saludable ni es rotundamente cierto. 

Boticaria garcía hacer ejecicio quemar excesos
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“Muchas personas piensan que pueden darse ciertos excesos porque después van al gimnasio a quemarlos. Creen que si ingieren 600 calorías y luego gastan otras 600 en el entrenamiento, el balance queda a cero. Pero la realidad es que el cuerpo no funciona como una simple ecuación matemática”, apostilla Carlos Dorado, Nutricionista Clínico y Deportivo y divulgador nutricional en redes sociales (conocido como @carlos.muyfit). 

Comer no solo se mide en las calorías que tienen los ejercicios consumidos, ni hacer ejercicio anulará una mala alimentación, sino que va mucho más allá, tanto en lo que refiere a nuestro metabolismo como a nuestra salud mental.

“Lo más importante que debes entender es que los alimentos no solo influyen en tu peso, sino en tu metabolismo, en la producción de hormonas y en la salud de tu microbiota intestinal”, afirma Carlos Dorado, quien añade que “más allá de cuántas calorías quemas, lo que realmente importa es elegir alimentos que beneficien a tu cuerpo y respalden tu salud a largo plazo.”

Para que comprendas todos estos conceptos, entiendas mejor el porqué esta “práctica de compensación” no es válida y mucho menos efectivas, pero, además, conozcas qué otros resultados puede derivar de esta asociación indebida entre comida y ejercicio, en revista CLARA hemos investigado sobre la materia y esto es todo lo que dicen los especialistas al respecto. ¡Muy atenta!

¿Por qué mi entreno no quema mis excesos? Esto es lo que dicen los especialistas

Como introducimos líneas atrás, puede ser normal que después de practicar una ingesta elevada o algún exceso determinado, intentemos compensarlo con más ejercicio o restricciones alimenticias.

Pero, ¿es efectiva esta práctica? Como explican los especialistas de Regenera, organización especializada en medicina integrativa, “el cuerpo no funciona como una cuenta bancaria en la que podemos hacer ‘depósitos’ de esfuerzo físico para contrarrestar que nos hemos pasado comiendo o bebiendo”, ya que realizar deporte no, exclusivamente, se asocia con la quema de calorías o viceversa. 

Boticaria garcía hacer ejecicio quemar excesos
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De hecho, más allá de quemar calorías, “lo que importa es el equilibrio y la relación que tenemos con la comida. Forzarnos a compensar con más ejercicio puede crear un ciclo de culpa y sobre exigencia que a largo plazo no es sostenible ni saludable”, explican desde el canal de Regenera en TikTok, haciendo alusión a esos posibles trastornos alimentarios que pueden derivar por una conducta negativa hacia la alimentación y la ingesta de las calorías. 

Y si te preguntas, ¿cómo puedes compensar entonces estos excesos? La respuesta es tan sencilla como que no debes compensarlos. Lourdes de la Bastida, nutricionista del Hospital Quirónsalud, así lo defiende, explicando que “si algunos días realizamos comidas más abundantes no hay que alarmarse, lo mejor es retomar la alimentación habitual y no hacer compensaciones. La alimentación debe realizarse con moderación, utilizando el sentido común, ya que ningún extremo es bueno”.

Simplemente con desarrollar un estilo de vida saludable, bastará. Recomendando dentro de la misma, un “aumento en el consumo de alimentos ricos en fibra como verduras, frutas, legumbres, cereales integrales y frutos secos, ya que nos ayudarán a estar saciados y así evitar comer grandes cantidades”, sostiene Lourdes de la Bastida.

Ayuno como solución: ¿sí o no?

De la mano con esta “falsa compensación” que muchos predican, también existe un numeroso grupo de personas que enfrentan un atracón o un exceso de su alimentación con un ayuno intermitente. Nuevamente, error. Y es que, “si el ayuno intermitente como estrategia ha demostrado muchos beneficios, cuando se realiza de manera estructurada y en determinadas personas”, como explica Boticaria García, en los casos de practicar ayuno simplemente para ‘castigarnos’ ni es válido ni mucho menos saludable.

Una cosa es practicar ayuno programado y otra cosa es que un día te quedes sin comer porque haya una fecha especial. “Esto, además de que te va a dejar sin batería ese día, puede que te estrese o que aumente tus niveles de cortisol que, a su vez, aumenta las hormonas del hambre y entras en un ciclo sinfín”, detalló García en una de sus charlas dentro del espacio ‘Zapeando’.

Boticaria garcía hacer ejecicio quemar excesos
Archivo RBA

Por lo tanto, si un día determinado has decidido darte un capricho o has disfrutado de una comida más copiosa por cualquier motivo, no pasa nada ni debes sentirte culpable. “Escucha a tu cuerpo al día siguiente y come lo que necesites. No hace falta que vayas al otro extremo y te generes un estrés extra”, recomienda la especialista en nutrición.