Ha pasado un mes desde que 'la DANA del siglo' sacudió la Comunidad Valenciana y otras tantas regiones de la península ibérica. Las inundaciones provocadas por el fortísimo temporal que azotó nuestro país provocaron consecuencias que siguen palpables en la zona cero del desastre semanas después. La ciudadanía, además de los efectivos desplazados hasta los lugares que precisan ayuda, continúa tratando de sacar agua y barro y salvar todo lo que ha quedado después del aguacero. Y en el medio del desastre, el delicado papel de la monarquía.

Tuvieron que pasar algunos días hasta que los Reyes tomaron cartas en el asunto, más allá de algún comunicado en la red o un breve parlamento de Felipe VI tras la tragedia. El caso es que, en una comitiva de la que también formaron parte Pedro Sánchez, el presidente del Gobierno central, y Carlos Mazón, el president de la Generalitat valenciana, Sus Majestades tomaron la determinación de viajar hasta municipios afectados, como Paiporta. Solo Felipe y Letizia y las otras autoridades, pero no su hija Leonor.

La Princesa de Asturias no formó parte de aquella primera y accidentada visita en la que su madre terminó con el rostro manchado de barro y no logró reprimir el llanto. Sea como fuere, se llegó a especular sobre la posibilidad de que la heredera, dado que está cumpliendo con su formación militar, asistiese a la zona para ayudar a sacar agua y barro de las calles. Una estampa que nunca se ha dado y contrasta con la voluntad de otras caras conocidas. Cantantes, actores y 'celebrities' que de forma voluntaria apostaron por ayudar en primera persona, pero de la princesa ni rastro. No es de extrañar que las últimas imágenes de su homólogo Christian de Dinamarca hayan dado que pensar al respecto.

Las sorprendentes fotografías de Christian de Dinamarca en África

Aunque en ningún caso tiene que ver la situación que vive el primogénito de Federico X y Mary Donaldson con la DANA, verlo desprendido de toda pompa para achicar agua con un cubo ha puesto en valor su faceta más cooperativa. Esa que con Leonor no ha podido darse dado que la Armada no ha sido llamada a las labores de ayuda a los afectados por el temporal en España, pero que muchos hubieran deseado poder ver. Sea como fuere, cabe destacar que en el caso del príncipe Christian se debe esto a la nueva realidad con la que convive de un tiempo a esta parte.

Basta con revisar este carrusel de instantáneas difundido por la cuenta oficial de Instagram de la Corona danesa. Con él, más allá de las tres fotografías -segunda, tercera y cuarta del álbum- en las que el futuro Rey viste ropa cómoda y casual, mueve barro y desplaza bloques y ladrillos, él mismo ha querido explicar a qué se debe esta atípica imagen. "Llevo casi tres meses en África Oriental. La vida cotidiana aquí es completamente diferente a la de casa. La comida, la cultura, el clima, la vida silvestre, las tareas y la gente hacen que sea una experiencia que nunca olvidaré", reza el pie de foto.

Un supuesto que no es novedad, pues ya el pasado octubre compartió el mismo perfil un recopilatorio de momentos de la llegada del príncipe al continente africano, donde cumple con una etapa de voluntariado tras haber terminado sus estudios. En lo que a las estampas en las que ahora ha aparecido trabajando duro en plena naturaleza, todo esto se remite a su labor allí. "Monitorear y registrar animales en el monte" o "construir nuevas casas para los empleados" son algunas de esas tareas que lo mantienen ocupado, aunque admite también que ha jugado "buenos partidos de fútbol con los locales".  

El paso atrás de Leonor para que sus padres se encarguen

Aunque el tiempo de Christian en África está cada vez más cerca de terminar, no deja de ser emocionante ver al príncipe fuera de su zona de confort y entregado a la causa. En el caso de Leonor y la DANA, pareciendo ya un imposible ver a la princesa con botas de agua y entre barro, ha quedado su distancia con el asunto justificada por la actuación de sus padres. Se sabe que se preocupó que estaba apenada por lo sucedido y se interesó por saber cómo estaban sus padres tras la tensión vivida en su visita a Paiporta, pero nada más que se conozca.

De este modo, y mientras ella ha podido seguir con normalidad las clases de su segundo curso de educación castrense en la Escuela Naval de Marín, en Pontevedra, han sido sus padres los que se han encargado de calmar el desasosiego. No solo con reuniones con las entidades necesarias para ayudar a las víctimas de las torrenciales lluvias, sino también regresando a la Comunidad Valenciana, siendo Chiva, Utiel y Letur sus últimas paradas hace tan solo algunas semanas.

Una segunda visita mucho más agradable, sin abucheos y entre aplausos, pero en la que primó la representación institucional por encima de pasar a la acción y colaborar en la retirada de barro. El contraste con los famosos que sí lo hicieron allí, o con otros 'royals' como Christian pese a darse por un pretexto distinto.