La alopecia de Carolina de Mónaco tras la muerte Stefano Casiraghi: una experta en cuidado capilar nos da las claves

Glamour, elegancia y clase. Tres palabras que fácilmente nos podrían venir a la cabeza cuando pensamos en la figura de Carolina de Mónaco. Su vida,  marcada por una infinidad de episodios -algunos buenos, otros no tanto-, podría ser el guion de cualquier película o serie. Lo cierto es que no ha sido nada sencilla y, en muchas ocasiones, el escándalo y la polémica han ido a su lado, pero su espíritu resiliente ha sido clave para afrontar cada una de las adversidades. Sin lugar a dudas, la década de los 90 fue una época que difícilmente podrá olvidar de su memoria, especialmente por todos los acontecimientos que sacudieron su vida. El más grande de todos: la abrupta muerte de su segundo marido y gran amor, Stéfano Casiraghi, en la bahía de Montecarlo el 3 de octubre de 1990. La vida de la hija de Rainiero de Mónaco daría un cambio radical. Seis años más tarde, en 1996, Carolina de Mónaco comenzaba una aventura con Ernesto de Hannover, que por aquel momento se trataba del marido de una de sus mejores amigas, Chantal Hochuli. Esto supuso todo un escándalo y perjudicó duramente su imagen pública.

En agosto de ese mismo año, la revista italiana OGGI puso en portada una imagen de Carolina de Mónaco que daría la vuelta al mundo. En ella, la princesa aparecía con su pelo totalmente rasurado. Debido a los picos de estrés que tuvo que soportar, la princesa Grimaldi tuvo que enfrentarse a una alopecia areata. Para poder conocer mejor este tipo de caída del cabello, desde CLARA nos hemos puesto en contacto con Helena Rodero, farmacéutica experta en cuidado capilar, para que nos dé las claves y poder entender mejor esta afección.

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¿CUÁL es EL DESENCADENANTE DE LA ALOPECIA aereta?

"La alopecia areata es de tipo no cicatricial y de origen autoinmune. Significa que nuestro sistema inmune es el que ataca al folículo y hace que se caiga el cabello. Salen calvitas en forma de placas circulares que no tienen cabello", nos comienza explicando la experta. Por lo que es la acción del sistema inmune la causante principal de esta caída del cabello. Aunque Helena pone de manifiesto que "hay otros factores y circunstancias que empeoran este tipo de alopecia", entre ellos, "el estrés y los déficits nutricionales". El impacto psicológico de la pérdida del cabello en una mujer es muy grande, y afecta de lleno al estado anímico. Eso sí, cabe destacar que, al tratarse de una patología no cicatricial, el cabello vuelve a salir. "Hay que tener un poco de paciencia, pero vuelves a recuperarlo", apunta la experta.

Formas de evitarla

Pese a que Helena Rodero nos confirma que "no se sabe cuál es el desencadenante exacto", sí sostiene que es fundamental "mantener un estilo de vida saludable, control del estrés, descanso adecuado, alimentación desequilibrada" para la prevención de cualquier patología. Además, nuestra experta hace especial hincapié en el control de los niveles de la vitamina D, "ya que está muy relacionada con las patologías autoinmunes y suele estar en déficit".

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Como siempre ocurre en estos casos, recurrir a los tratamientos caseros para intentar buscar una solución no es lo más indicado. "La alopecia areata se trata con medicamentos tipo corticoides para bajar esa hiperactividad del sistema inmune. Ya sea en forma tópica, como en inyecciones o vía oral, dependiendo de su gravedad. Usar lociones capilares para la caída con evidencia científica potencia la recuperación", señala la experta. Y aunque la falta de cabello puede hacernos pensar que lavarlo muy frecuentemente puede empeorar la situación, nuestra experta nos asegura lo contrario: "No hay que tener miedo en lavar el cabello porque el cuero cabelludo tiene que estar siempre limpio, sobre todo cuando hay un problema de caída", desliza Helena en su análisis para CLARA.

Helena Rodero NOS CUENTA LOS TIPOS de peinados QUE AYUDAN A DISIMULARLA

"Si hay pocas placas y son pequeñas, pueden hacerse peinados con trenzas y coletas siempre que no sean tirantes. Si son tirantes hay riesgo de complicar esta alopecia con otra que se llama alopecia por tracción. Otro truco es usar fibras de queratina para disimular también las calvitas", sostiene Helena. Pero además, nuestra experta también destaca que, por otro lado, "dar visibilidad puede ayudar mucho a otras mujeres". "Siempre conocer a alguien de referencia que tiene el mismo problema ayuda mucho". Cabe destacar que, durante todo el tiempo que Carolina sufrió este tipo de alopecia, los turbantes fueron sus grandes aliados. Ante cualquier signo de alopecia, Helena Rodero señala que "la solución está en el dermatólogo".