Parece que el tiempo no pase para Demi Moore. Y no, no se trata de magia ni de cuestiones genéticas (aunque por supuesto que influyen), sino de cuidarse por dentro y por fuera, pero también de los tratamientos de cirugía estética a los cuales la actriz estadounidense se ha sometido en más de una ocasión. 

A sus 62 años, Demi Moore luce un rostro terso y firme, sin apenas arrugas, una mirada abierta y rejuvenecida y unos pómulos bien marcados. Está claro que el bisturí ha jugado (y lo sigue haciendo) un papel clave en el aspecto de la actriz, pero la sencilla rutina facial que sigue, además de sus buenos hábitos de estilo de vida, son otra pieza fundamental del puzzle. 

Demi Moore
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De hecho, la actriz a veces ha sido objeto de crítica debido a los tratamientos y operaciones estéticas que se ha realizado, e incluso hay quienes argumentan que es un ejemplo de lo que ella misma interpreta en la película 'La Sustancia', en la que encarna el personaje de Elisabeth Sparkle, una mujer que se resiste al paso de los años. 

Pero Moore sabe bien lo que es ser mujer y trabajar en una industria tan complicada y feroz como lo es la de Hollywood. La actriz es símbolo de empoderamiento y ajena a las críticas y, de hecho, también está a aprendiendo a aceptarse y a abrazar su edad. En este sentido, según afirmó en una entrevista al medio Us Weekly, no descarta dejarse el pelo blanco y según afirmo, “cien por ciento me dejaré crecer las canas cuando tenga más”. 

Los trucos de belleza facial de Demi Moore

Ahora bien, tal como apuntábamos, el aspecto jovial que puede presumir de lucir Demi Moore a sus más de 60 años no solo es cuestión de cirugía estética.  En esta dirección, según señaló en una entrevista para Harper's Bazaar,"mi rutina de cuidado facial generalmente es de menos, es más". Es decir, la actriz sabe qué lo importante es utilizar productos de calidad y adaptados a tu tipo de piel. 

En este sentido, basa su rutina en un buen limpiador y un sérum, además de una buena hidratación. Una hidratación profunda en su rostro que también aplica en la zona del pecho y los senos. Asimismo, Moore añadió que "si acabo de trabajar y tengo la cara llena de maquillaje, suelo aplicarme una mezcla de diferentes cremas hidratantes para asegurarme de revitalizar mi piel". 

Pero la actriz, también reconocía en la entrevista que uno de sus mejores secretos no tiene que ver con ningún cosmético en concreto. "Mi mejor secreto para el cuidado de la piel es gratis: sonreír", apuntó la actriz. 

Combatir la piel deshidratada

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En esta dirección, según explicó la Dra. Gadea Braceras, dermatóloga residente R4 en el Hospital Universitario San Sebastián, a la revista CLARA, entendemos por piel deshidratada aquella que "es tirante con descamación, rugosidades al tacto y grietas", y añadió que las causas de su deshidratación pueden ser externas o internas. 

Asimismo, la experta detalló que "se puede reconocer por los siguientes signos: falta de luminosidad, mayor susceptibilidad al enrojecimiento, descamación, sensación de tirantez, y una pérdida de vitalidad". 

Además, conviene saber que la deshidratación se puede tratar, por lo que si queremos presumir de un cutis como el de Demi Moore, tenemos que grabarnos con fuego la importancia de la hidratación. ¿Pero qué debemos priorizar en nuestra rutina facial para que sea realmente hidratante?

La experta Gadea Braceras, apuntaba que "para reforzar la función barrera, lo mejor es elegir cremas que contengan ingredientes emolientes y calmantes como ceramidas o ácido hialurónico". Una recomendación que Demi Moore aplica en su rutina de skincare, y según reveló en la entrevista, concretamente usa la crema hidratante regeneradora intensiva Retrouvé y un aceite facial rico en vitaminas A, C, D y E de Ilapothecary