Las tabernas más TOP de Madrid que no te puedes perder

5 de enero de 2022, 14:00

Nos encantan las buenas tabernas. Esos lugares tan nuestros donde disfrutar de momentos especiales con amigos, siempre rodeados de cañas bien tiradas, rico tapeo y los mejores bocados para compartir. Aunque las tradicionales ofrecen un encanto muy especial, en los últimos tiempos han aparecido establecimientos de este tipo que también tienen su magia. Hoy te traigo una selección de tabernas madrileñas muy variadas (incluidas algunas de reciente inauguración) para todos los gustos y estilos.

La más canalla

Una opción más que recomendable para saborear platos sorprendentes a un precio moderado, y en un ambiente divertido e informal es Arallo Taberna. Cuenta con una localización inmejorable -en la calle de la Reina, a dos pasos de Gran Vía-, y se ubica en un espacio moderno con toques industriales. Además, prácticamente desde todas las mesas se puede ver al equipo de cocina en acción. La carta es corta, pero original y ejecutada con acierto. Una de las claves es el buen producto que manejan: excelentes sus pescados y mariscos. Combinan con acierto los ingredientes tradicionales con los internacionales (con especial atención a los asiáticos y japoneses). Entre sus platos más destacados se encuentra el jurel con escabeche de zanahorias; los chipirones a la parrilla japonesa sobre crema de brócoli o la caballa curada en ponzu de zumo de pomelo y naranja; las croquetas-nigiri de corvina y salsa verde; el tartar de carabinero y gambón con emulsión de sus cabezas y encurtidos hechos en la casa o el tuétano con steak tartar de vaca rubia gallega, que se cocina a la brasa en horno Josper y se termina en mesa con un toque de soplete. Pero hay que estar atento a los fuera de carta, como las gyozas de cocido gallego servidas sobre el caldo de este guiso que están buenísimas, o el bocadillo de cigalas. Son unos maestros con los mejillones: las croquetas elaboradas con este producto (de mejillones con queso azul Savel y de mejillón tigre con chorizo picante), así como los que cocinan abiertos al horno de carbón, con salsa de chiles y cilantro, están deliciosos.

• Pregunta por el producto estacional. ¡Los trabajan fenomenal! Como los espárragos blancos de temporada, las alcachofas, puerros…

La de moda

Esta taberna refinada, ubicada en la plaza del Ecuador, ofrece una cocina basada en los sabores de siempre, sin artificios y con buen producto. Nueva Casa Orellana (Chamartín) presenta una propuesta 100% castiza y actual, que ofrece una barra de picoteo con mucho protagonismo en esta nueva casa de comidas. Su carta repite la fórmula de su hermano mayor (Casa Orellana, en la zona de las Salesas), permitiendo pedir la mayoría de sus platos en formato de media ración para disfrutar de un tapeo variado. La cocina casera es su seña de identidad y entre los platos más demandados se encuentran sus dos versiones de ensaladillas, centollo y atún en escabeche (buenísima esta última), los huevos rotos con carabineros o las carrilleras guisadas con Don Zoilo. Otra de sus propuestas más populares es el mollete de calamares a la andaluza y mayonesa de ajos asados, las croquetas de rabo de toro o cualquiera de sus guisos de cuchara en temporada, como las lentejas con chistorra de Navarra a la brasa.

• El consejo. Si vas a tomar el aperitivo, pide alguno de los vermuts acompañado de sus tablas de quesos y embutidos ibéricos.

La más cheli

En pleno Chamberí se encuentra esta taberna que nunca falla. Alma Cheli tiene un local pequeño, pero dispone de amplia terraza. Ofrece comida casera, tapas tradicionales (croquetas, albóndigas, tortilla de patata, callos, ensaladilla rusa, pisto con huevos, anchoas…) y algunas otras con aires internacionales (como las bombas de cochinita pibil). Pero también dispone de opciones interesantes para los que prefieran ensaladas y verduras, como las flores de alcachofas con jamón ibérico en temporada, y la ensalada templada de chipirones con buenos tomates. El secreto para que esté siempre llena es su estupenda relación calidad-precio. Imprescindible pedir su vermut casero elaborado al momento con aroma de ginebra, un chorrito de Campari, servido en copa de cóctel y con aceituna.

• Por partida doble. Cuentan con un segundo establecimiento en la zona de Matadero.

Solo con burbujas

A unos pasos de la Gran Vía madrileña, La Burbujería abre de jueves a domingos con una propuesta informal que gira alrededor de la cocina fusión y las bebidas espumosas. El resto de la semana el restaurante cierra y el espacio acoge el Ateneo Panda y Lola, con un programa de actividades culturales para animar la vida del barrio. Los lunes, hay propuestas culturales organizadas por la casa, gratuitas o a precio simbólico: ajedrez, matemáticas para adultos, un club de lectura, clases de armónica, etc.; los martes, ceden el local para iniciativas ajenas; y los miércoles, es el turno de la gastronomía, con catas de quesos, de vinos…

La Burbujería cuenta con más de sesenta referencias con preferencia por los pequeños productores. Casi la mitad de la oferta la protagonizan los vinos espumosos, tanto nacionales (cava, corpinnat y espumosos de calidad, entre otros) como internacionales (champagne, prosecco, Moscato d’Asti, etc.). También ofrecen una variada selección de vinos que incluyen denominaciones de España y del mundo, con algunas sorpresas. Las cervezas llegan de la mano de la marca zaragozana Ámbar, que elabora etiquetas muy particulares con poca implantación en la capital, ideales para armonizar con los sabores que maneja el chef. Entre sus platos fijos se encuentran las croquetas; la ensaladilla; las alitas de brócoli y coliflor con rebozado crujiente, especias cajún y dip de yogur; bravas de yuca frita, salsa de tomate al chile chipotle, cilantro fresco y ralladura de lima; y la hamburguesa de ternasco de Aragón con salsa de cerveza Guinness.

• El must. Hay que estar atento a sus múltiples sugerencias del día porque merecen la pena.

Especial tardeo

Un interiorismo rompedor, de más de doscientos metros, frente a la Puerta de Alcalá es su seña de identidad. En Patio de Leones, con reminiscencias de taberna cañí, ofrecen recetas de siempre como la tortilla, las bravas, gambas al ajillo, los callos o las croquetas; platos típicos procedentes de toda la geografía española como la mojama gaditana, la cecina leonesa, las gambas de Huelva, las anchoas cántabras, el pulpo a la gallega o el gazpacho andaluz. También disponen de todo tipo de bebidas con una amplia selección de vinos. Lo mejor de este lugar es su ambientazo, especialmente al caer la tarde, lo que le convierte en un sitio más que recomendable para disfrutar con amigos.

• Y también para los madrugadores. Cuenta con un maestro churrero que elabora churros artesanales desde primera hora de la mañana.