25 manualidades navideñas para disfrutar y dejar la casa preciosa

¿Eres asidua a los mercadillos? En los puestos de objetos antiguos y tradicionales no te costará encontrar cencerros, campanas, llaves y otros utensilios con aire rústico y vintage que puedes aprovechar para darle un encanto especial a tu decoración navideña. Añádeles una cuerda, un lazo, algo de abeto y ¡listo!

Puede que quieras aprovechar las bolas del año pasado pero te apetezca cambiar el estilo. O tal vez hayas encontrado una oferta buenísima de bolas transparentes pero las ves un poco sosas. En cualquier caso, con pintura harás milagros. Tan solo tienes que proteger bien la superficie de trabajo, apoyar la bola sobre un vaso y echar la pintura por encima dejando que escurra. Una vez seco puedes pintarle manchitas marrones (no se aprecian pero están).

Las piñas son uno de los elementos más socorridos de la decoración tanto de otoño como de Navidad. Son ideales en el árbol, en un centro de mesa, en una corona o allá donde las pongas. Puedes dejarlas al natural, pintarlas enteras, solo los extremos o añadirles cuentas como aquí. Muy elegantes.

Uno de los personajes más simpáticos de las manualidades navideñas es el muñeco de nieve. Como ves, no necesitas prácticamente nada para que te quede simpático y vistoso. Dos rodajas de madera, un poco de tela, dos ramitas, rotulador y algo naranja bastarán.

Aprovecha tus paseos otoñales para recoger ramitas que podrás utilizar de diversas maneras. Una de las más agradecidas es hacer pequeños árboles con los que colocar en los pomos de las puertas, los tiradores de los armarios o incluso el corcho de la habitación de tus hijos. Prueba a decorarlos con estrellas, pompones o purpurina.

Los bastidores se han convertido en un gran aliado de las manualidades y es habitual verlos como base de labores de crochet. Aquí le han dado un aire muy original colocando dos arbolitos nevados. Conseguirás ese efecto con pegamento, nieve artificial y sal gorda o en escamas. El contraste con la bola roja queda genial.

¿Tienes recortes de papel con motivos navideños? ¡Qué bien! Así puedes aprovecharlos para hacer un arbolito tan mono como este que podrás colocar en tu escritorio, una pequeña estantería o cualquier otro lugar de tu casa u oficina. También puedes utilizar papel de periódico o de revista y darle la forma que desees.

La decoración navideña casa muy bien con todo el estilo rústico. Para elaborar esta corona tan especial y natural necesitarás ramas, malla de gallinero, ramas de abeto y naranja deshidratada. No solo quedará preciosa sino que olerá genial.

Es lógico que queramos engalanar nuestras casas en estas fechas pero no hace falta desembolsar mucho dinero para ello. Estos árboles tan coloridos son una buena prueba de ello. Lana y pompones son los materiales que necesitarás para su elaboración. 

Nos ha gustado mucho esta corona elegante y sofisticada que da una vuelta a las tradicionales. En vez de ser repartir los adornos de forma homogénea los concentra en un solo lado y el resultado es muy llamativo.

Una de las cualidades más interesantes de las manualidades navideñas es la creatividad que desprenden. Por lo general, puedes hacer muchas y bonitas cosas gastando muy poco dinero. Y si quieres hacer proyectos de reciclaje, mejor todavía. Para esta necesitarás un cono como base, pelo artificial para hacer la barba, dos cuentas de madera y calcetines viejos, mejor si son desemparejados.

Los tarros dan mucho juego en el mundo del reciclaje creativo. Si los pintas con pintura de purpurina, les añades limpiapipas, ojos móviles y un pompón rojo, obtendrás al reno Rodolfo más divertido. No te olvides de limpiar y secar bien el tarro antes de comenzar.

Las guirnaldas son la manera más rápida de darle un ambiente festivo a cualquier espacio. Estas de papel quedarán ideales en el árbol, una estantería o en la habitación de los niños. Además, aprovecharás para reciclar periódicos que ya no sirvan.

Siguiendo la idea que veíamos anteriormente de reciclar tarros, aquí tienes otra propuesta muy interesante. Esta decoración nevada es muy fácil de hacer y quedará ideal para crear un ambiente gélido. Necesitas pegamento, sal, cordel rústico y algo de verde y rojo (puede ser artificial).

Unos leotardos rotos que vayas a tirar pueden servirte para darle forma a un creativo muñeco de nieve. También necesitas dos bolas de distinto tamaño (pueden ser de porexpán), botones, alfileres, algo naranja y algo de tela.

A los niños les encantará esta manualidad tan sencilla y divertida con la que transformarán unas sencillas macetas en los personajes más entrañables de la Navidad. Un muñeco de nieve, Papá Noel, un elfo y el reno Rodolfo son facilísimos de hacer con pintura, fieltro y ojos móviles.

Los niños disfrutan un montón con aquellas manualidades en las que puedan mancharse las manos. Además de ser un paño muy navideño y original, es un recuerdo de su infancia que te quedará para siempre. Asegúrate de utilizar una pintura específica.

Este Rodolfo es una manualidad muy especial y divertida para hacer con los más pequeños. Por un lado porque podéis aprovechar los paseos del fin de semana para recoger piñas, y por otro porque estarán bien distraídos decorándolo. Apenas necesitas materiales aparte de pompón y fieltro ya que puedes improvisar unos ojos con cartulina y rotulador negro si no tienes de los que son móviles.

Las lentejuelas, y en general todo lo que brille, ejerce un poder hipnótico sobre los más niños. Estos copos de nieve hechos a base de palitos de helado, quedarán genial con un surtido de lentejuelas de colores. Si no encuentras palitos azules siempre puedes pintarlos.

Esta tarjeta de Navidad es tan bonita y llamativa que es perfecta para regalar a los abuelos. Además, es una buena manera de estimular la motricidad fina de los niños. Necesitas papel verde, algo de amarillo y pegamento. Quedará mejor si todas las tiras son del mismo tamaño.

Un clásico que ha traspasado fronteras. En la imagen puedes ver cómo queda la tarjeta tanto cerrada como abierta. Utiliza un rotulador más fino, lápiz negro o cera para evitar que traspase.

El scrapbooking es una técnica para personalizar álbumes a base de recortes y motivos decorativos convirtiéndoles en pequeñas obras de arte. Esta tarjeta de Navidad es realmente sencilla de hacer pero tiene un resultado de lo más profesional. Para que los árboles de papel te queden a distintas alturas necesitas una pequeña almohadilla adhesiva.

Nos ha encantado esta tarjeta tan natural pero a la vez navideña. En realidad no necesitas mucho material con lo que te permite reciclar distintos lazos, ramitas o adornos que tengas en casa. Eso sí, mejor que sean planitos y pesen poco. Las naranjas deshidratadas son una de las opciones decorativas que más han triunfado en las últimos años.

Otra idea muy creativa que nos ha gustado mucho es la posibilidad de bordar sobre las tarjetas de Navidad. Primero deberás hacer un dibujo a lápiz que te sirva de guía y luego ir agujereando por donde quieras que pase el hilo. La tarjeta debe ser gruesa o no quedará bien.