Este libro tiene algo mágico, porque María Dueñasno es la única escritora que lo ha señalado cuando le preguntan por sus lecturas favoritas. Beatriz Serrano, finalista del Premio Planeta con Fuego en la garganta hablaba también del impacto que había tenido en su vida en el podcast Clásicos con altura.
La novela es imperecedera, y como ya te voy adelantando, un clásico de la literatura. Pero no uno de esos que necesitas meses y buen talante para acabarlo, sino de los que te lees en una semana porque no puedes apartar los ojos de sus páginas. Uno de esos que recuerdas para siempre, y que además se expresa en clave femenina.
Ya estaba en mi lista de leídos, pero viendo que tantas autoras hablan de él lo he revisitado. Mi conclusión es clara. Tanto Beatriz Serrano como María Dueñas tienen razones de sobra para señalarlo como uno de los mejores libros de la literatura universal: te deja lecciones que perduran toda la vida.
GTRES
El libro favorito de María Dueñas
Como toda buena escritora, María Dueñas no tiene un único libro favorito. En la entrevista que concedía a Librea hace un año, en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, la autora destacaba varios de ellos. Don Quijote de la Mancha, por ejemplo, es una de esas obras que, defiende Dueñas, tiene que leer todo el mundo al menos una vez en la vida.
También recuerda con cariño Un mundo para Julius, de Alfredo Bryce Echenique, un libro que confiesa haberse leído muchas veces y que le fascinó la primera vez que cayó en sus manos cuando era una adolescente. “Me pareció tan tierno, tan bonito, tan desgarrador en muchas cosas, pero a la vez con una ironía, con una dulzura y una ternura, que es otro de los libros que recuerdas la vida entera", declaraba la autora de El tiempo entre costuras.
Y ese “otro” acontecía porque en esa misma entrevista ya había respondido con otro título cuando le preguntaron qué libros recomendaba leer. “Me encantó cuando era joven”, decía la autora, rememorando el libro que ha marcado la carrera de tantas escritoras.
GTRES
Una novela que ha marcado la vida de generaciones
Si hablamos de clásicos, de libros escritos en clave femenina, de marcar la vida de jóvenes escritoras… ¿Te imaginas ya el título que tanto recomienda María Dueñas? Es, por supuesto, Mujercitas, de Louisa May Alcott.
“Recuerdo que Jo March, que era ese tipo de personaje que todas aspirábamos a ser: libre, distinta, fuera del sistema, rompiendo los moldes canónicos que se esperaban”, rememora la escritora.
Jo es el personaje que ha inspirado a miles de mujeres a ser escritora. Beatriz Serrano, a quien mencionaba al inicio de su artículo, también la recuerda como una inspiración. Como un modelo a seguir.
Y es que, aunque al final tuvo que hacer concesiones inevitables dada su época, Lousia May Alcott consiguió regalar a las mujeres de decenas de generaciones un imaginario nuevo, de damas que podían hacer las cosas a su manera. De independencia y libertad arrancadas en un sistema que no veía bien que una mujer fuera libre ni independiente.
Amazon
Un ejemplo a seguir
Por todas estas locuras que hace Jo, que la sacan del ejemplo canónico de “mujercitas” de bien en su época, Dueñas la recuerda con especial cariño. “Se corta el pelo, escribe, publica, quiere ser periodista, quiere ser novelista”, enumera con emoción, “es el tipo de personaje a contracorriente que nos da lecciones de vida interesantes”.
Las hermanas March y sus lecciones
En Mujercitas las lecciones no faltan. De una forma u otra, todas las hermanas March se revelan y luchan contra las convenciones del sistema.
Meg se casa, como debía hacer toda buena dama, pero lo hace por amor, algo que no se estilaba en 1860. Se casa con un buen hombre, con un hombre pobre, y lidia con las consecuencias de su decisión desde una humanidad inspiradora.
Por su parte, Amy encuentra su propia vía para convertirse en lo que desea. Quiere ser pintora, comprende que en ese mundo su sueño es inaccesible si no es por medio del matrimonio. Y defiende su derecho a ver, igual que lo hacía el hombre, el matrimonio como un acuerdo económico. Un medio para un fin: pintar.
Y Jo, sin ella, no habríamos tenido a muchas de las escritoras que la conocieron en las páginas de esta novela. Porque el suyo es un ejemplo de libertad, de rebeldía. Nadie puede decirle cómo hacer las cosas. Su vida es suya, y piensa convertirla en lo que ella quiera. Y aunque ahora, desde nuestra perspectiva del siglo XXI, su final no parezca tan feminista como nos gustaría, en su época rompió todos los moldes.
iStock
Una lectura perfecta para el verano
Si no has leído Mujercitas todavía, es tu momento. Y si ya lo hiciste, una relectura te descubrirá nuevas dimensiones de este clásico imperecedero.
Y es que ahora que se acerca el verano no se me ocurre mejor recomendación literaria. Por más años que hayan pasado desde su publicación, la pluma de Louisa May Alcott no se hace pesada. Todo lo contrario. Mujercitas es uno de esos libros que puedes leer en una semana, y que se recomienda incluso para lectoras adolescentes.
La novela es una maravilla, y cuando acaben las vacaciones, volverás al trabajo con la inspiración necesaria para convertirte en la mujer que desees ser. Especialmente recomendado para todas aquellas creativas que buscan su lugar en el mundo.