¿Cada cuánto hay que lavarse el pelo? No tenemos duda alguna que esta es una de las preguntas más repetidas en lo que respecta al cuidado capilar. A la hora de resolver esta cuestión, seguro que te surgen más dudas al escuchar tanto que lavar el pelo todos los días lo estropea como que cuanto menos lo laves se engrasa menos la raíz. Lo cierto es que existen multitud de mitos en torno a este tema y la respuesta correcta la tienen los expertos.
Puede que sientas que tu cuero cabelludo se ensucia rápido y optes por lavarlo a diario o, por el contrario, tengas una raíz seca que te permite pasar varios días sin tocar el champú. Pero si atendemos a los consejos de los expertos, estos aseguran que no hay una regla universal que indique cuál es la frecuencia correcta. Partiendo de la base de que el champú solamente se aplica en el cuero cabelludo, nuestra rutina de lavado se basará más en el tipo de piel que en el estado del cabello", revela Rubén Ramos, hair & makeup stylist.
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Prestar atención al cuero cabelludo es fundamental para llevar a cabo una correcta higiene capilar pero, según indica Clara Lacasta, expecialista en Medicina Capilar del IMR, también hay otros aspectos que afectan a la producción de sebo como son "la dieta, el estrés, el tipo de piel y las condiciones hormonales". A estos hay que sumar factores externos como la contaminación, los productos para el pelo o la exposición al sol también que también influyen en la frecuencia del lavado del pelo.
¿Lavar el pelo con frecuencia provoca más caída?
Uno de los mitos más extendidos sobre el lavado del cabello sostiene que lavarlo con demasiada frecuencia puede provocar su caída. Esta creencia tan arraigada se aleja bastante de la realidad, tal como asegura la dermatóloga Alejandra Reolid: "El lavado regular no influye directamente en la cantidad de pelo que se cae".
Lo que suele observarse al lavar el cabello es la caída que ya se había desprendido y que se libera durante el lavado. Teniendo en cuenta que el ciclo capilar es asíncrono, al día se producen mudas entre 100-200 pelos y, al lavar el pelo, se retira el que ya se ha desprendido. Si alargamos el lavado del cabello a tres días, en ese momento recogeríamos entre 300-600 pelos, algo que sería completamente normal.
Además, hay que tener en cuenta que el objetivo del lavado adecuado es "eliminar el exceso de grasa, suciedad y residuos que pueden obstruir los folículos capilares, contribuyendo a un cuero cabelludo más saludable", tal como explica la dermatóloga.
Causas que provocan la caída del pelo
Para evitar la caída del cabello, la clave está en mantener una rutina de higiene capilar adecuada, o lo que es lo mismo, una que se adapte a las necesidades de cada tipo de cabello. Lo que sí puede afectar a la salud capilar es no lavar el pelo por miedo a su caída. "Al evitar el lavado, se acumulan sebo y células muertas en el cuero cabelludo, lo que puede derivar en inflamación y favorecer la aparición de problemas capilares como dermatitis seborreica o caspa", confirma Alejandra Reolid.
Estos trastornos inflamatorios sí pueden empeorar la salud del cabello y, en algunos casos, contribuir a la caída si no se tratan adecuadamente. A esto hay que sumar otros factores que debemos evitar para que nuestra melena mantenga su densidad:
- Evita peinados muy tirantes: estos no deben ejercer demasiada presión sobre el cuero cabelludo.
- Tratamientos fortalecedores: son efectivos al aplicarlos por la noche, cuando estamos más relajadas. "Un masaje capilar de solo dos minutos antes de dormir ayudará a que el producto penetre mejor y a estimular la circulación", comenta la peluquera Olga G. Bartolomé.
- Volumen extra con tratamientos de salón: no solo fortalecen, sino que también aportan densidad al cabello, dándole un aspecto más lleno y saludable.