Corría la década de los 90 cuando una mujer argentina irrumpió como nunca en el olimpo de la moda. Valeria Raquel Mazza, natural de Rosario, se convirtió rápidamente en la primera 'top model' del país en triunfar a escala internacional en una época verdaderamente crucial para la industria. Una larga melena rubia y un rostro de ojos azules difíciles de pasar por alto para los diseñadores. Todo esto a pesar de que dedicarse al modelaje nunca estuvo entre sus intenciones en primera instancia. Con todo lo que supone aterrizar y toparse con un engranaje difícil de ajustar y un mundo complejo para el que no todo el mundo vale. Pero ella sí valía, y así se lo hicieron saber infinitud de firmas, que quedaron prendadas de una belleza y unas medidas que encajaban a la perfección con el cánon preestablecido.

Más de 500 portadas de revista y un currículum envidiable a la espalda en el que figuran marcas tan célebres como Ralph Lauren, Valentino o Carolina Herrera. El pistoletazo de salida vino de la mano del reputado Gianni Versace, primero en brindarle una oportunidad en las pasarelas de todo el mundo. La suya, una imagen loada por los críticos, elevada al mismo nivel que la de Cindy Crawford o Naomi Campbell, dos de las más populares supermodelos por aquel entonces. Algo similar sucedía con la alemana Claudia Schiffer, con quien la comparaban asiduamente. Tal era el parecido a ojos de algunos que incluso llegaron a bautizarla como 'la Claudia argentina' en alguna publicación. Y eso no le gusto nada a la original. Mazza ni siquiera exhibió pretensión alguna de copiarla, pero Claudia solo podía haber una. El paradigma idóneo para que se gestase una rivalidad histórica.

VALERIA MAZZA REVELA Cómo Claudia Schiffer quiso apartarla del modelaje

La ascensión de Valeria quedaría marcada por esa sombra del enemigo próximo de forma persistente. A medida que ganaba terreno en la industria y cosechaba más éxitos, el conflicto se hacía mayor. Una especie de guerra fría más que evidente de la que no se habló nunca de forma extraexplícita en el mundillo y de la que la argentina ya no reniega desde hace tiempo. En el documental 'Valeria Mazza: Un sueño dorado', producido para Paramount+, la protagonista no duda en desvelar el modo en el que Schiffer, que se sentía amenazada, intentó marginarla e incluso apartarla de algunos desfiles y eventos.

Valeria Mazza 1998
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"Siempre hubo tensiones entre nosotras. Las pasarelas pueden ser un lugar competitivo (...). Cuando empecé no le divertía mucho y donde pudo, trató de sacarme", confiesa Mazza sobre las presiones en esta producción autobiográfica. Estrategias de expulsión veladas, puesto que reconoce que "a mí no me hacía nada" y todo lo manejaba a las espaldas para que, simplemente, le llegasen menos oportunidades laborales. "Yo sabía que hablaba con diseñadores para que no estuviera en el desfile. Esas cosas son moneda corriente en el mundo de la moda", expresó en el pasado para el programa 'Desayuno americano'. En cualquier caso, la capacidad de resiliencia de la argentina prevaleció sobre los intentos de nadie por opacar su éxito. "Claudia ya era Claudia cuando yo empecé. Hice determinados trabajos y me comparaban con ella (...). Después aprendimos y yo hice mi carrera. Tampoco me quedé en la de aprovechar esa situación. Al contrario". El relato sobre cómo construyó una carrera sólida por ella misma y obviando cualquier 'feud' impuesto.

el regreso triunfal de valeria a la televisión en 'bailando con las estrellas'

Después de algún tiempo alejada de los medios españoles, Valeria Mazza volvió a la televisión en el 2023 como una de las concursantes de la tercera temporada 'Mask Singer: adivina quién canta'. Una aparición estelar que liga con el siguiente y más reciente de sus trabajos en Telecinco.

Valeria Mazza Jesús Vázquez
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Desde enero de 2024 y junto a Jesús Vázquez, la modelo se encarga de presentar la nueva edición de 'Bailando con las estrellas' en Telecinco. Nuevo reto profesional en el que retoma su faceta de conductora en el que 8 famosos compiten por ver quién es el mejor en eso de subirse al escenario y danzar al ritmo de la música. La adaptación de un espacio que triunfa por todo el mundo y que casa a la perfección con un perfil tan global como el suyo.