Los cocineros vascos se ponen de acuerdo: este es el orden correcto para aliñar una ensalada deliciosa

Nos encantan las ensaladas fáciles, rápidas de hacer, que entren por los ojos ¡y que estén buenísimas! Y es que son una manera muy sencilla de meter un montón de nutrientes en el mismo plato sin apenas darte cuenta. También son buenas para tu bolsillo ya que son económicas, y más aún si las preparas con productos de temporada. Por haber, hasta hay un método infalible para variar tus ensaladas y que no se vean siempre iguales. ¿Lo conocías?

Otra de las ventajas de las ensaladas es que las puedes preparar con antelación, siempre y cuando dejes el aliño para el momento de servirlas para evitar que se pongan lacias. Y hablando de aliño ¿tú también te lías con el orden correcto para aliñar una ensalada? De hoy no pasa que resuelvas esta duda.

¿Cuál es el orden para aliñar una ensalada?

Ya lo dice el refrán: "la ensalada, salada, bien aceitada y poco avinagrada". Aunque, como en casi todo en esta vida, para gustos los colores. Otro dicho que nos viene perfecto. Pero ¿es cierto que hay un orden correcto para aliñar la ensalada? Pues sí, y tiene su explicación, independientemente de que luego decidamos seguirlo o no. 

Al aliñar la ensalada, lo que se pretende es realzar sus sabores. Si añadieras primero el aceite y luego la sal y el vinagre, estos dos últimos terminarían resbalando sin llegar a penetrar en los alimentos. Por lo tanto, el primer ingrediente que debes añadir es la sal. El segundo será el vinagre, ya sea de vino, blanco o de manzana. Y por el último, llega el turno del aceite de oliva que además proporciona un brillo de lo más atractivo y apetecible. ¡Buen provecho!

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Y si lo prefieres, ¡haz vinagreta!

Si te apetece enriquecer tus ensaladas y darles más profundidad y sabor, aquí tienes varias recetas de vinagreta. Mezcla los ingredientes en un bol, emulsiona, y deja que cada comensal se sirva a su gusto.

• Vinagreta de limón. Mezcla seis cucharadas de zumo de limón con dos de aceite y una pizca de sal y pimienta. Muy ligera y refrescante.
• Vinagreta de naranja. Necesitarás seis cucharadas de zumo de naranja natural, dos de aceite de oliva, sal y pimienta. Va genial con ensaladas con pollo, marisco y fruta. 
• Vinagreta de soja. Mezcla seis cucharadas de salsa de soja con dos cucharadas de aceite de oliva y dos cucharadas de zumo de limón. Ideal para ensaladas orientales o pokes hawaianos.
• Vinagreta de mostaza. Se prepara con dos cucharadas de mostaza antigua, dos de aceite de oliva virgen, y dos de zumo de limón y sal. Perfecta para ensaladas de pollo y manzana.