Soy nutricionista y te confieso las 6 cosas que MÁS te inflaman en Navidad y deberías evitar

¿Te has sentido alguna vez con la barriga hinchada, cansada o con malestar después de una comida o cena navideña? Seguro que sí, y no eres la única. Muchas personas sufren de inflamación durante estas fechas, debido a una serie de factores que afectan a nuestro organismo.

Pero no te preocupes, porque hay soluciones. S i hace poco te dimos las 7 recetas navideñas antiinflamatorias para los días de pesadez, que te ayudarán a aliviar los síntomas y a disfrutar de la comida sin renunciar al sabor; hoy queremos contarte cómo evitarlo desvelándote cuáles son las 6 cosas que más te inflaman en Navidad para que puedas disfrutar de las fiestas con más energía, vitalidad y felicidad.

¿Por qué se produce la inflamación?

La inflamación es una reacción natural del cuerpo ante una agresión, y puede ser puntual, aguda o crónica. Si solo te pasa en Navidad o en momentos concretos como reuniones con amigos u otros eventos, se trataría de una inflamación leve, que produce hinchazón abdominal provocada por exceso de gases o retención de líquidos. Pero tranquila, hay algunas cosas que puedes hacer para bajar la inflamación del cuerpo.

Otras posibles causas de sentirse pesada y con la barriga hinchada en Navidad o en momentos puntuales se debe a tragar aire al comer o beber, a la fermentación de algunos alimentos en el colon, a una mala digestión, a una intolerancia, al estreñimiento o al estrés que puede ocasionarnos estos días. Pero, ¿cuáles son las cosas más comunes que nos pueden inflamar en Navidad? Te lo contamos.

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¿Qué nos provoca más inflamación en Navidad?

En estas fechas, tener más vida social y más relaciones nos beneficia mucho a nivel psicológico, ya que nos hace estar más felices. Sin embargo, también solemos comer más y peor, lo que nos provoca inflamación y malestar.

Por eso, es importante elegir buenas opciones cuando salimos fuera a comer, y tener en casa una bandeja con dulces saludables. Así, podremos disfrutar de la Navidad sin inflamarnos, y aprovechar los beneficios de la socialización. Estas son las cosas que deberías evitar para no sentirte pesada en las fiestas:

• Comer a todas horas: Uno de los aspectos que más nos inflaman en Navidad es el hecho de comer a todas horas, ya que no dejamos a nuestro cuerpo el descanso que necesita para realizar las digestiones entre comida y comida. Lo ideal es respetar los horarios de las comidas principales, y evitar picar entre horas o saltarse el desayuno. Así, evitaremos sobrecargar nuestro sistema digestivo y favoreceremos el metabolismo.

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• Tener tantas comidas fuera de casa: Es habitual en estas fechas salir a comer fuera, pero a veces nos olvidamos de escoger las mejores opciones en los sitios a los que vamos, como por ejemplo: comer pescado a la plancha, carne a la plancha, ensaladas, moluscos como mejillones, berberechos, almejas, pulpo o calamar, o incluso mariscos, y todo lo que lleve huevo que no sea frito, como una tortilla. También es una buena opción verduras a la brasa o la parrilla. Y en cuanto a la bebida, elige siempre agua con o sin gas, pudiendo acompañar con unas rodajitas de limón y unas hojas de hierbabuena.

• El exceso de alcohol: Otra de las cosas que más nos inflaman es el exceso de alcohol, ya sea cerveza, vino y después de comer copas de alcohol destilado, chupitos, etc. Todo eso afecta mucho a nuestro cuerpo, ya que el alcohol es una sustancia tóxica que altera el funcionamiento del hígado, el páncreas y el cerebro, y que además aporta muchas calorías vacías que se acumulan en forma de grasa. Lo mejor es moderar el consumo de alcohol, y alternarlo con agua o infusiones.

• El tabaco: Hay personas que solo fuman en fiestas o durante el fin de semana, o incluso a diario, pero cuando más consumen es cuando salen fuera de casa. Es otro factor que influye en la inflamación, ya que el humo irrita las mucosas del aparato digestivo, aumenta la acidez estomacal y favorece la aparición de úlceras y gastritis. Lo más recomendable es dejar de fumar, o al menos reducir su consumo al mínimo.
• Los fritos: No suelen faltar en los menús de Navidad alimentos como calamares rebozados, croquetas, etc, elaborados con aceite oxidado porque se sobrecalienta y rebozados con harinas refinadas, que son inflamatorias. Los fritos dificultan la digestión, aumentan el colesterol y los triglicéridos, y favorecen la obesidad y la diabetes. Lo mejor es optar por otras formas de cocinar más saludables, como el horno, el vapor, el microondas o el papillote.
• El azúcar: Y no podemos olvidarnos del azúcar. Ya no solo cuando salimos fuera de casa, con el postre o con las harinas refinadas, sino también dentro de ella con la típica bandeja navideña con bombones, turrones, polvorones, mazapanes, etc, que son muy ricos en azúcar, en harinas refinadas y además contienen aceites vegetales hidrogenados que también inflaman. El azúcar es un alimento que provoca picos de glucosa e insulina en la sangre, que favorecen la inflamación, el envejecimiento celular, la resistencia a la insulina y la diabetes. Además, el azúcar es adictivo y estimula el apetito, lo que nos lleva a comer más de lo que necesitamos. Lo mejor es limitar el consumo de azúcar, y sustituirlo por edulcorantes naturales como la stevia, el xilitol o la miel.

Como ves, para evitar la inflamación y sentirnos mejor en Navidad debemos cuidar nuestra alimentación y nuestros hábitos. Es importante no comer a todas horas, elegir opciones saludables cuando salimos fuera de casa, moderar el consumo de alcohol y tabaco, evitar los fritos y el azúcar, y beber en lugar de refrescos. Así, podrás disfrutar de las fiestas sin renunciar al sabor, y cuidar tu salud y bienestar.

No obstante, si algún día abusas de todos estos alimentos, disfrútalo y no te sientas culpable por ello. Al día siguiente solo tendremos que continuar con nuestros hábitos saludables y listo.