Tamara Falcó reaparece junto a Enrique Iglesias en una emotiva (e inédita) foto juntos

Tamara Falcó es la típica buena hermana que, cuando estás a punto de cumplir años, se va a casa de mamá y se dedica a abrir todos los álbumes familiares para encontrar la fotografía perfecta con la que felicitarte en tu gran día. Ahora le ha tocado el turno a Enrique Iglesias, al que, a pesar de la distancia física que les separa, está muy unida.

“Ayer fue el cumpleaños de mi hermano Enrique Iglesias. Te deseo un año lleno de alegrías y deseos cumplidos”. El deseo de Tamara Falcó volaba hasta Miami, facturado con una fotografía inédita de ellos de pequeños. El artista le saca 7 años a su hermana, y en la instantánea tomada cuando eran niños, se aprecia aún más la diferencia de edad. Él coge a la niña en brazos, de una manera muy protectora, orgulloso de su hermanita. Además, también se aprecia un parecido mucho mayor entre ambos.

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La dolorosa separación de Enrique Iglesias y Tamara Falcó

Hay que recordar que, de pequeños, no pudieron pasar todo el tiempo que les hubiera gustado juntos. ¿El motivo? La amenaza que recibió Julio Iglesias por parte de la banda terrorista ETA.

En diciembre de 1981, el doctor Iglesias Puga, padre del artista, fue raptado por la banda y encerrado durante tres semanas en un zulo, localizado en un pueblo de Zaragoza. Esto provocó en Julio un irrefrenable miedo a que algo malo pudiera volver a ocurrirle a alguien de su familia. Un terror que se vio acrecentado cuando empezó a recibir anónimos amenazantes, que le advertían de que sus hijos serían los próximos en correr la misma suerte que su padre.

Empezó entonces el calvario de Isabel Preysler por mantener a salvo a los pequeños. Acudían a clase con guardaespaldas y estos se encargaban de llevarles a todos los lugares pertinentes, desde los cumpleaños de sus amiguitos, como las clases de natación. De hecho, Chábeli vivió un intento de secuestro que quedó en nada gracias a la rápida actuación de estos profesionales de la seguridad.

Visto el panorama, Isabel Preysler tuvo que tomar una dolorosísima decisión: decir adiós a sus pequeños y dejarles marchar. La socialité y el artista convinieron que lo mejor para los menores era una mudanza a Miami, donde Julio empezaba a ser una gran estrella. Allí no tendrían a su madre, pero, al menos, esta tendría la certeza de que nadie trataría de acabar con sus vidas. Este fue el mayor renuncio y acto de amor que la Reina de Corazones ha realizado hasta la fecha. Aquella despedida aún le duele.

Eran motivos de fuerza mayor, así que Chábeli, Julio y Enrique hicieron las maletas. Ellos también encararon esto como un acto de gran valentía y entendieron que debían empezar una nueva vida lejos del nido materno, el único que hasta entonces conocían. Fue un absoluto trauma que, durante años, resonó con mucha fuerza en sus vidas, pero que, a día de hoy, parece haber cicatrizado.

Esta despedida también entrañó otra separación: la de su hermanita pequeña, Tamara.

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Una relación de hermanos de lo más atípica

La socialité y chef era muy pequeña cuando sus tres hermanos mayores, por parte de madre, se tuvieron que marchar de casa. Pasaban juntos los veranos y las vacaciones escolares, que ella las vivía con enorme ilusión. La esperanza de volver a verles cuanto antes ha seguido viva hasta el día de hoy. Los cuatro desarrollaron un fuerte vínculo; uno tan sólido que ni un océano podía con ellos. Entendieron que su relación iba a ser así y así la han mantenido hasta la edad adulta.

Conforme los años pasaban y estos se volvían más autónomos, empezaron a desarrollar otras vías para estar en contacto y mantener la unión. Ya no dependían de su madre, podían llamarse y contarse cómo les estaban yendo las cosas en ese momento, qué agobios tenían con el trabajo, el nuevo cotilleo sobre su última ilusión o cuándo podrían coger un avión para verse. Y así hasta el día de hoy. Las Navidades son sagradas y las últimas las pasaron todos en Miami. Las primeras de Tamara como mujer casada y ahí estuvo Íñigo Onieva para no perderse sus primeras festividades con la familia transoceánica de su mujer.

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Enrique, el gran ídolo para Tamara Falcó

En la relación entre Tamara Falcó y Enrique Iglesias se da también otro ingrediente determinante: la admiración. La madrileña pasó toda su infancia idolatrando a su hermano mayor, ese que tan bien se portaba con ella y tanto la cuidaba. La llegada a la adolescencia de la colaboradora de ‘El Hormiguero’ coincidió con el ascenso a la fama de Enrique. Todas sus amigas eran fans de su hermano y para ella adquirió una nueva dimensión; un profundo orgullo que no ha hecho más que ir a más conforme el paso de los años. De hecho, ahora que es padre de mellizos, también le admira por su fabulosa faceta familiar; en la que ha puesto a sus pequeños como su gran prioridad y a quienes dedica ahora la mayor parte de su tiempo.

Enrique es, para Tamara Falcó, su gran inspiración y ejemplo a seguir. Un sentimiento que la sobrepasa y que queda de sombra demostrado con gestos como este.