Oysho es mucho más que ropa interior. Además de morirnos por su ropa deportiva (he perdido la cuenta de cuántos leggins de yoga acumulo en el cajón) sus vestidos beachwear pueden servir para mucho más que ir a la playa –y más este verano que no sabemos cómo será...–. Algunos hasta te los puedes poner para ir de boda de lo bonitos y elegantes que son. Y una de sus grandes ventajas es que los diseños suelen ser bastante atemporales así que puedes hacerte con uno hoy para ponértelo el año que viene.