Imaxtree
Los trajes femeninos se han vuelto todo un imprescindible en nuestros armarios. Están al mismo nivel que las camisas, los jeans y los vestidos negros. Así, y desde que la esencia working girl entró en nuestras vidas, tenemos claro que, en primavera, son los reyes de las calles.
Y no solo para ir a la oficina. Porque llevar traje es sinónimo de estilo, elegancia y empoderamiento femenino. La primera mujer en vestir uno fue Marlène Dietrich en 1930. Y a raíz de aquel momento, en la sociedad comenzó el debate entre el escándalo y la aceptación. Años más tarde, en 1962, el diseñador Yves Saint Laurent vistió a Catherine Deneuve con un esmoquin, convirtiendo el traje femenino en una de las piezas más reconocibles de su marca.
Así, la sastrería femenina pasó del rechazo a la devoción, conquistando las semanas de la moda y animando a la mujer a luchar por la igualdad. Es un símbolo de fuerza, sensualidad y poder. Por eso nos encanta, y por eso toda mujer debería tener uno en su armario.
Además, este 2021 los trajes regresan con mucha fuerza, llenando de color nuestros armarios. En primavera se llevarán los colores pasteles, sin embargo, también encontraremos versiones más clásicas, con americanas oversize y complementos dorados como protagonistas. Cuando suban las temperaturas, el tweed y la lana pasarán al lino, sustituyendo las chaquetas por chalecos, las botas por sandalias y los pantalones largos por shorts o minifaldas.
Sea como fuere, lo que está claro es que hay muchas maneras de llevar nuestros trajes con mucho estilo, pero si necesitas inspiración, ahí van 4 formas de combinar trajes de entretiempo para ser la más trendy de la primavera.