Las segundas rebajas son uno de los periodos más felices del año. Cuesta encontrar algo que te guste pero como des con ello y encima sea de tu talla, ay amiga, eso es como encontrar el amor verdadero. Y es que a estas alturas de las rebajas los precios están tan por los suelos que una tira de tarjeta sin pudor. Hemos encontrado vestidos a 6€, unas botas buenas por 50€ y otros chollazos que merece, y mucho, la pena llevarse a casa. Mira, mira.
¿Qué comprar?
En la galería tienes varias propuestas en las que inspirarte. Seguro que se te acaban las ideas para ir a trabajar, así que te proponemos vestidos, jerséis y pantalones que te ayudarán a crear looks para el día a día. Además, en la galería también encontrarás prendas coloridas y frescas para que puedas llevarlas en invierno pero también en primavera. Y para que puedas ir a la última, también hemos cazado prendas de súper tendencia (como el abrigo de leopardo o las botas por encima de la rodilla) a precios más que asequibles.
Haz buenas inversiones
Cuando vas de rebajas tienes dos opciones: o invertir tu presupuesto en unas pocas prendas y accesorios de calidad que te durarán varias temporadas, o comprar esas prendas y accesorios de moda con los que conseguir looks variados. Lo ideal es un equilibrio. Lo que sí te recomendamos es que dediques una parte del presupuesto a renovar los básicos de tu fondo de armario.
Cuidado con los "chollos"
Cuando encontramos en rebajas una pieza con un 70-80% de descuento, enloquecemos y, muchas veces, la compramos porque claro ¡es tan barata! Antes de dejarte llevar, pruébate la pieza, asegúrate de que no tiene ningún problema de patronaje y, sobre todo, mira que te quede bien.
Antes de salir de compras, haz una lista
En ella puedes anotar qué necesitas y qué quieres comprar. Muchas veces compramos por impulso, así que si llegas a las tiendas con una lista (más o menos) concreta, corres menos riesgo de comprar por comprar. Echa un vistazo a tu armario y mira bien qué prendas necesitan un cambio.
¡Y diviértete!
Esto es lo fundamental. Ir de compras debería ser una actividad divertida en la que conocerte más y aprender sobre tus gustos, sobre lo que mejor te sienta, los colores que te favorecen, etc. No dejes que ese "ansia compradora" pueda contigo y tómatelo con calma.