Es otro de los puntos negros del desorden. Separa los collares, las pulseras, los anillos y los pendientes. Aparta los que están estropeado o les faltan piezas, y decide si deshacerte de ellos o llevarlos a arreglar, pero no los vuelvas a guardar. Y organiza y almacena de nuevo lo que te quedas.
- Para que los collares no se enreden utiliza piezas donde puedas colgarlos o un gancho en el interior de la puerta del armario.