Como has visto, plantarle cara a la grasa no es tan complicado como parece de entrada. Estas son las reglas básicas para limpiar el horno, la campana extractora y la placa de inducción. Toma nota.
Cómo limpiar el horno, la campana extractora y la placa de inducción
- Limpiar después de cada uso. Aunque parezca una contradicción, hacerlo regularmente facilita y reduce el trabajo. Así la grasa no se acumula ni se reseca.
- Más vale proteger que limpiar. Es el equivalente al más vale prevenir que curar trasladado a la cocina. Si por ejemplo proteges las bandejas del horno o la placa de gas con aluminio u otros protectores, evitas que se ensucien tanto.
- Utiliza productos adecuados... y que no sean nocivos para la salud y, en la medida de lo posible, respetuosos con el medio ambiente. Así evitas dañar tanto los electrodomésticos y las superficies como la salud o el ecosistema. Si quieres, puedes echar un vistazo a los productos de limpieza caseros que triunfan en internet.