Desde colocar la vajilla en su sitio hasta aprovechar los cajones, la encimera, e incluso el bajo del fregadero, con baldas, barras y ganchos, aquí tienes todos los trucos para ordenar la cocina y sacarle todo el partido a su espacio.
La vajilla, en su sitio (y lo bonito, a la vista)
- Uso diario. En la cocina, guarda la vajilla del día a día. Si tienes una más festiva, mejor almacénala en el comedor o el salón.
- Ojo con las pilas. Apila los platos llanos con los llanos, los boles con los boles... Así las pilas siempre se verán más ordenadas.
- Todo engamado. Si escoges un color para todas tus tazas y lo combinas con platos blancos, se verá más ordenado.
- ¿Lo usas? Si sirves la sopa en platos individuales, ¿para qué la sopera? Deshazte de lo que no uses.
Tener la vajilla a la vista solo es apto si eres muy ordenada. Si no, pon puertas
Cajones en orden (una misión posible)
- Para los cubiertos. Es fundamental que el cubertero te encaje a la perfección, tanto con las medidas del cajón como con los cubiertos que guardas. Puedes tener otro para los utensilios de cocina.
- Para ollas y sartenes. Usa separadores y guarda las tapas por tamaño, así podrás poner las ollas y sartenes pequeñas dentro de las grandes y optimizarás el espacio. Las más deterioradas, ¡a la basura!
Encimeras despejadas (más sitio para trabajar)
- Electrodomésticos. Si la encimera está despejada, la cocina se ve más ordenada. Por ello, guarda todos los pequeños electrodomésticos en armarios. Si no puedes, deja fuera los de uso diario.
- Barras para colgar. Ayudan a despejar las superficies y a tener los utensilios a mano. Ponlas en el salpicadero de la placa de cocción o del fregadero, donde más se usarán.
- Ganchos y rieles. Saca partido a las baldas colocando en la parte inferior ganchos para tazas o rieles para copas.
Deshazte de las tazas más usadas. Se calcula que no se necesitan más de 6
Debajo del fregadero (aprovecha el espacio)
- Compartimenta. El mueble situado bajo el fregadero suele ser un caos por la forma de las tuberías. Una solución para aprovecharlo bien es instalar baldas y organizadores extraíbles.
- Ilumina. Pon una tira de leds para que te sea fácil encontrar lo que busques dentro.
- No acumules. Reduce los productos y quédate con los que de verdad uses. Así te será más fácil organizarlos y que no se queden en el fondo de un armario, donde acabas por no buscarlos.
¿Qué hago con las bolsas de plástico?
- El triangulito. Dobla la bolsa de plástico por la mitad, llevando un asa sobre la otra. Vuelve a doblar a lo largo. Ahora haz un doblez triangular en la parte de la base y ve plegándola así. Al final, mete las asas en el último doblez. Así ocupan menos espacio.
- Quédate con 10, el resto sobran. Almacénalas cerca de donde guardas la compra, junto a las bolsas de tela. Lleva siempre un par en el bolso para no tener que pagar por ellas en el súper.
- Reciclar. Puedes usar las bolsas de más para tirar el plástico y lo que vaya al contenedor de no reciclable. Y las bolsas de papel, para reciclar el papel.
Y si quieres descubrir más secretos de cocina, no te pierdas nuestros trucos.