Cuando el sol incida sobre la vivienda, sube las persianas y abre las cortinas para que el calor procedente del sol se filtre a las habitaciones. Si tienes tejado, puedes abrir una ventana de tejado, como las de Velux, para que el sol entre por allí. Cuando se ponga el sol, el proceso debe ser el inverso para que el calor que se ha acumulado dentro no se esfume.
- Doble cortinaje. Es muy útil, ya que te permite tener unas cortinas finas que dejen pasar el sol pero que te resguarden de las miradas ajenas, y unas cortinas gruesas para evitar que el calor se escape cuando se retira el sol.