5 productos de limpieza en los que puedes ahorrar (y 2 en los que no)

Calcula cuántos productos utilizas para limpiar el lavabo (y echa cuentas con la calculadora). Con lejía para el inodoro y un limpiador de baño de marca blanca será suficiente para poner a punto los sanitarios. Más que del producto en sí, se trata de aplicarlo adecuadamente.

El paso a paso para que queden impecables es el siguiente:

• Aplicar el producto.
• Dejar actuar.
• Frotar con un estropajo insistiendo en las zonas más complicadas.
• Aclarar con agua caliente.
• Secar bien para evitar humedades. 

Una de las tareas menos agradecidas del hogar. Qué rabia da utilizar productos muy caros e invertir mucho tiempo para que, de repente, se ponga a llover ¿verdad? Por eso, no te compliques en gastarte demasiado en un limpiacristales concreto, compra el más barato o incluso fabrícate el tuyo propio. 

• Cómo elaborar tu limpiacristales casero. Diluye una parte de vinagre blanco por cinco de agua. Introduce en un pulverizador, agita y listo.
• Evitar las pelusas. El truco que te ayudará a evitar las que sueltan algunos trapos es hacerlo con gamuzas de microfibra o papel de cocina (mi opción favorita siempre y cuando no tengas unos ventanales enormes ya que necesitarías demasiado).

Si notas que tu ropa no queda bien, puede que el problema no esté en el lavado en sí, sino en la plancha. Además, pueden quedar pegados restos de ropa que deben ser eliminados para evitar catástrofes. Aunque existen productos específicos para limpiar la plancha puedes ahorrártelos y sustituirlos por algunos trucos caseros para limpiar la plancha y dejarla como nueva. 

• Limpiar la plancha con vinagre blanco. Humedece un paño limpio con un poco de vinagre blanco y pásalo por la base de la plancha. Si no desaparecen las marcas, añade al vinagre un par de cucharadas de sal y repite la operación. Antes de guardarla sécala bien con un paño.

Seguramente no limpies la plata muy a menudo. Esto se traduce en que los productos que hayas podido comprar terminan secándose en el armario de la limpieza. Entonces ¿por qué gastarte tanto dinero en ellos si apenas los utilizas? 

• Una solución casera es aplicar pasta de dientes y dejarlo actuar unos segundos. Después solo tienes que frotar con un cepillo de dientes que no utilices. ¡Te sorprenderá el resultado! 
• Aquí tienes varios trucos fáciles y rápidos para limpiar la plata que pueden interesarte.

Si no quieres gastar (o no encuentras) un limpiador en polvo específico para alfombras puedes probar con trucos originales y caseros. No necesitas invertir dinero en productos sino que lo realmente importante es que pases el aspirador frecuentemente y con insistencia. Ácaros, polvo, pelusas, pelos, arena... ¡se lo llevará todo (y no te gastarás nada)!

• Limpiar la alfombra. Para eliminar el mal olor y la humedad de la alfombra basta con espolvorear bicarbonato sódico sobre ella. Deja actuar unos minutos y aspira.

A la hora de lavar la ropa lo tengo clarísimo: la clave está en el detergente. Este sería el segundo de los productos en los que no merece la pena escatimar porque se nota en el resultado. De hecho, por eso los Ariel Allin1 PODs Oxi han recibido el Premio Clara 2020 de Alimentación y Hogar a la Mejor higiene del hogar.

• Efectivas. Este producto ofrece el doble de limpieza en una sola cápsula, sin necesidad de usar otros productos específicos para ropa de color o blanca que encarecen la lista de la compra. 
• Cómodas. Estas cápsulas son muy fáciles y nada engorrosas de usar (adiós a las salpicaduras del detergente líquido) porque van directas al tambor de la lavadora.
• Cero desperdicio. Al ofrecer la dosis justa de detergente impiden que malgastes sin darte cuenta porque no es cuestión de cantidad sino de calidad. ¡Un ahorro a largo plazo!

Otro de los productos en los que no deberías escatimar euros es el que utilizas para fregar los platos. Es cierto que hay muchos en el lineal del supermercado pero necesitas uno verdaderamente eficaz.

• Fuera bacterias. Muchas entran en nuestro cuerpo por la boca, por eso necesitas un producto que desinfecte la vajilla y todo aquello que utilices en la preparación de los alimentos. 
• Grasa. Tiene que ser capaz de eliminar la más difícil. Un producto muy barato resbalará por ella sin conseguir desincrustarla, por mucho que eches. Gastarás el envase en dos días sin conseguir resultado alguno. 
• Cuida tu piel. Un lavavajillas de baja calidad puede ser demasiado agresivo y llegar a producirte picores o escozor. 
• Guantes. Aunque la mayoría de veces los utilices guantes, no puedes arriesgarte a sufrir ningún tipo de quemadura o lesión. Demasiados requisitos para que pueda cumplir un producto de 1€ ¿verdad?