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Tu casa crece contigo y, por eso, cada cierto tiempo te apetece renovarla. El cambio de estación o el cierre de una etapa también suelen ser los desencadenantes de ese ansía decorativa pero ¿cómo hacerlo sin dejarte el sueldo?
Cambiar la alfombra, renovar los cojines, comprar unas cortinas nuevas, apostar por los objetos en formato grande o hacer una composición de cuadros en la pared son algunos de los trucos más fáciles y efectivos a tu alcance. A continuación te proponemos varios ejemplos prácticos con los que tu casa parecerá otra.