¿Eres de las que cruzan los dedos o tocan madera para conseguir buenos augurios y huyen despavoridas cuando ven un gato negro? En caso afirmativo es que eres un poco supersticiosa...
¿Qué son las supersticiones?
Las supersticiones no son otra cosa que las creencias irracionales que atribuyen una explicación mágica a los sucesos. Y algo que condiciona la vida de las personas que creen en ellas si hacen o dejan de hacer algo con el convencimiento de que, en el caso contrario, podrían sufrir una desgracia.
Como has visto, aunque se trata de concepciones sin ningún tipo de base científica, casi todas las supersticiones provienen de hechos míticos o históricos.
De entrada, muchos de estos hechos tenían una cierta lógica que poco o nada tenía que ver con la mala suerte, las maldiciones o el enfado de un dios determinado. Pero con el paso del tiempo, y al pasar de generación en generación, se acaban instalando en el imaginario colectivo y se convierten en algo comúnmente aceptado por todo el mundo, como cuando nos comemos las uvas en Nochevieja.
Y al final algunas de estas supersticiones se interpretan como simples supercherías huecas, como que los cuadros se tuerzan por culpa de los espíritus, mientras que otras parecen hasta lógicas y necesarias, como evitar dañarse con un paraguas al entrar y salir de casa.