Tres alojamientos perfectos para desconectar (de verdad)

Después de los meses tan complicados que hemos atravesado, del encierro obligado y de las restricciones a nuestra libertad de movimientos, una de las cosas que más anhelamos es volver a disfrutar de la naturaleza, respirar aire puro y perdernos entre campos, vegetación y montañas. Si suspiras por reencontrarte con lo más genuino sin renunciar al lujo y las comodidades, apunta estas tres direcciones. ¡Te van a encantar!

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Si lo tuyo es la exclusividad, estás de enhorabuena porque acaba de aterrizar en España el primer Hotel SO de toda Europa (la marca de lujo del grupo Accor). Un cortijo contemporáneo con unas instalaciones impresionantes, rodeado de espacios abiertos y ubicado en un enclave con unas panorámicas espectaculares al Mediterráneo y las montañas.

Si hay algo que caracteriza a este hotel es el mimo por el detalle hasta en los rincones más insospechados y el servicio exquisito por parte de cada uno de los empleados. Con los toques de diseño ideados por Dolores Cortés (atención a los uniformes del personal porque no dejan indiferentes), el ambiente que han recreado te sumerge en entorno idílico, perfecto para la desconexión.

Uno de los grandes aciertos del nuevo SO es su variada y cuidada oferta gastronómica que promete convertirse en un punto de encuentro de los residentes de la zona, no únicamente de los huéspedes. El restaurante Cortijo se inspira en la cocina tradicional y utiliza los mejores productos andaluces y de proximidad. El Hi-So, al aire libre, es ideal para disfrutar de sus pescados y carnes a las brasas, especialmente por las noches. Society es un restaurante de alta cocina pensado para los paladares más sibaritas, y el Social-Club resulta perfecto para comer o cenar con las mejores vistas al campo de golf.

Su centro de bienestar es uno de los mejores de la Costa del Sol. Y atención a los programas de actividades que van a poner próximamente en marcha (catas de vinos, eventos, encuentros culturales, programas de relajación y wellness…) porque prometen convertirse en imprescindibles.

• De capricho. Si te quieres regalar un homenaje, reserva una de las suites del ático. Son para quedarse a vivir y disponen de unas terrazas fabulosas.

La mejor Ibiza

La isla ofrece mucho más que playa y sol… ¡y de qué manera! También cuenta con espectaculares parajes naturales, acantilados, montañas, interminables bosques de pinos y tranquilos pueblos interiores; atractivos todos ellos que permanecen más allá del verano y de los que se puede disfrutar todo el año. Porque Ibiza también es para el otoño y hasta para el invierno.

Si quieres olvidarte de todo disfrutando de un retiro genuino, debes alojarte en el Hotel rural Can Lluc. Ubicado en pleno corazón de la isla, se erige a los pies de un tranquilo valle de gran valor ecológico, rodeado de pinares, árboles frutales, algarrobos, almendros y olivos milenarios. Tienes que visitar la casa principal, una construcción payesa con muros de piedra y vigas de madera de las que ya no quedan: un lugar perfecto para sobremesas íntimas.

Si puedes elegir, reserva sus villas. Tienen jardín propio, son amplias y están rodeadas de flores y vegetación; es como dormir en medio del bosque. Nadar y relajarte en su piscina infinity o caminar por los senderos te hará sentir muy bien. Cuentan con gimnasio, spa y tratamientos en colaboración con Ibiza Massage. También organizan escapadas de relax, románticas, bodas especiales… Si deseas organizar un evento personalizado, te lo diseñan a medida.

• Un plus adicional. El trato cercano y familiar de los propietarios, quienes te harán sentir como en casa.

Relax a las puertas de Madrid

En ocasiones buscamos destinos alejados para relajarnos sin darnos cuenta de que muy cerca de nuestros lugares de residencia encontramos pequeños tesoros. Situado entre la sierra de Gredos y el río Tajo, el Hotel Valdepalacios se ubica en una extensa finca entre Castilla y Extremadura. A poco más de una hora y media de la capital, este hotel gran lujo es ideal para pasar unos días de descanso en plena naturaleza, para desconectar, disfrutar y sentirte libre. Encandila el entorno bucólico que lo rodea, con más seiscientas hectáreas.

El alojamiento es precioso: una casa de principios del siglo XIX catalogada y diseñada por un arquitecto francés como casa de recreo. También cuenta con otras dependencias encantadoras como establos, casas de labor, patios y rincones pintorescos que nos pueden convertir en las reinas de Instagram. Es fácil cruzarte con ciervos y se pueden contemplar un gran número de especies de aves.

El hotel cuenta con habitaciones espaciosas y luminosas, algunas de hasta ochenta metros. Todas son diferentes, con una decoración elegante y cuidada al detalle, en la que se han respetado los pilares originales. El hotel facilita todo tipo de propuestas de ocio: puedes elegir entre piscina exterior o climatizada, paseos a caballo y en calesa por la dehesa, pesca y navegación por el pantano, circuito de footing, bicicleta de montaña o team building, e incluso se pueden organizar picnics, clases de cocina, catas y degustaciones de productos de temporada. Valdepalacios también cuenta con capilla privada.

• Atención a su spa. Se encuentra en unas antiguas dependencias con grandes ventanales e iluminación natural. Desde la piscina climatizada rodeada de cristaleras se puede divisar la sierra de Gredos.