Desde que comenzó la pandemia, las autoridades sanitarias han repetido hasta la saciedad las tres principales medidas de protección con las que contamos frente a la COVID-19:
Seguir estas tres recomendaciones no es una garantía de no contraer la enfermedad, pero sí disminuye las posibilidades de hacerlo en un porcentaje muy alto. Ahora bien, ¿estamos haciéndolo bien? Los expertos han detectado numerosos errores en el uso de las mascarillas. Las estamos utilizando, sí, pero a veces cometemos fallos que pueden estar anulando su protección y poniendo en riesgo la salud de todos.
Lo más importante
Recuerda, si estás en un espacio cerrado –sobre todo sin ventilación– con personas que no pertenecen a tu burbuja de convivencia, es muy importante que no te quites la mascarilla. Aunque, no te confíes: las mascarillas por sí solas no protegen si estás mucho rato expuesta. Según los expertos, si vas a verte con alguien –en muchas comunidades autónomas solo puedes reunirte con 6 personas–, es mejor que lo hagas al aire libre. Si es en un espacio cerrado, procura que haya ventilación cruzada (abre las ventanas), no os quitéis las mascarillas, mantén la distancia de 2 metros y reduce el tiempo del encuentro lo máximo posible. Cuanto más se relajan estas medidas, más aumenta el riesgo de contagio.
Hay que hacerse a la idea de que llevar la mascarilla correctamente protege al que tienes en frente. Solo si la llevamos todos (Y LA LLEVAMOS BIEN), estaremos todos protegidos. Grábate a sangre estas recomendaciones sobre lo que nunca debes hacer con tu mascarilla. ¡Aplícate el cuento!