Moretones: por qué salen sin haberte dado un golpe y cuándo hay que preocuparse

Situación: te miras los brazos o las piernas y de repente, sin previo aviso, tienes un moretón. Normalmente, los moretones se producen por un golpe o una lesión, pero a veces pueden salir sin que nos demos cuenta. ¿Por qué ocurre esto y qué significa? Te explicamos las posibles causas de los moretones espontáneos y cuándo hay que preocuparse.

¿Qué significa cuando te salen moretones?

El Dr. José Antonio Páramo, del servicio de Hematología de la Clínica Universidad de Navarra, explica que la mayoría de las veces los moretones espontáneos se deben a causas benignas como la fragilidad de los vasos sanguíneos o problemas de circulación, si bien no son las únicas.

Los hematomas se producen por la salida de glóbulos rojos de la sangre y su acumulación en la piel. Esto puede estar provocado, además de por un golpe, caídas, cirugías o inyecciones, por otras causas: alteraciones de la circulación, trastornos de la pared de los vasos sanguíneos, alteraciones en los niveles de plaquetas, y también, por ciertos medicamentos.

"Normalmente, desaparecen al cabo de dos semanas, tras pasar por diferentes fases en las que el hematoma va cambiando de color: al principio, suele mostrar un tono rojizo o morado, para luego pasar a un azul violáceo y, posteriormente, a un amarillo verdoso", explica el Dr. Julio Maset, Director Científico Corporativo de Cinfa.

¿Qué pasa si me salen moretones sin golpearse?

Hay ciertos hábitos o estados pasajeros que también favorecen la aparición de moretones sin haberte dado ningún golpe. Practicar ejercicio intenso de manera excesiva, estar embarazada o los días previos a tener la regla son momentos y situaciones propensas a los morados. También puede deberse a otros motivos como:

• El envejecimiento, que hace que la piel se vuelva más delgada y pierda grasa, lo que hace que los vasos sanguíneos sean más frágiles y se rompan con más facilidad.
• La exposición al sol, que daña la piel y reduce la producción de colágeno, lo que hace que los vasos sanguíneos sean más débiles y propensos a romperse.

• La deficiencia de vitaminas, como la vitamina C, la vitamina K o la vitamina B12, que son esenciales para la formación y el mantenimiento de los vasos sanguíneos y la piel.
• Algunos medicamentos, como los anticoagulantes, los antiinflamatorios, los corticoides, los anticonceptivos o los antibióticos, que pueden interferir con la coagulación de la sangre o debilitar los vasos sanguíneos o la piel, lo que puede provocar moretones con facilidad.

Hay que tener en cuenta que a algunas personas les aparecen moretones con más facilidad que a otras, y puede verse influenciado por muchos factores, como por ejemplo sus genes, como apunta señala el Dr. José López, experto en trastornos hemorrágicos del Bloodworks Instituto de Investigación Bloodworks Northwest, en National Institutes of Health.

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¿Cuándo hay que preocuparse por un moretón?

Se debería consultar con el médico cuando el moretón es muy grande o doloroso, especialmente si aparece en el tronco, la espalda o la cara. También si no mejora ni desaparece después de dos semanas, o aparecen con mucha frecuencia.

Además, si el moretón se acompaña de otros síntomas, como fiebre, sangrado por la nariz o las encías, sangre en la orina o las heces, o articulaciones inflamadas, también se debería consultar a un especialista.

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¿Qué hacer para quitar los moretones?

Para quitar los moretones cuando son benignos, puedes probar algunos de estos remedios caseros que pueden ayudar a acelerar el proceso de curación y a reducir el dolor y la inflamación:

• Por sí solos. Los hematomas en la piel suelen desaparecer de forma espontánea al cabo de 1-2 semanas sin que requieran ningún tratamiento.
• Calor. Aplicarlo sobre el moretón una vez hayan transcurrido 24 horas desde su aparición, para mejorar la circulación y la eliminación de la sangre acumulada.
• Con pomadas. Algunas cremas de uso tópico (por ejemplo, las de pentosano polisulfato sódico) facilitan la reabsorción de los hematomas. Hay que aplicar una capa fina en la zona.
• Hielo. En los primeros días es aconsejable aplicar hielo durante 10 minutos. Eso evita la inflamación y ayuda a que desaparezca antes. Si es en una extremidad, también es bueno elevarla.
• Masajear. Masajea suavemente el borde del moretón con el dedo pulgar, para activar el sistema linfático y favorecer la reabsorción de la sangre.
• Paños tibios. A partir del segundo o tercer día de su aparición, puedes aplicar paños tibios (no calientes) para aumentar el flujo sanguíneo hacia el tejido dañado y acelerar su recuperación.

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