10 trucos para comer despacio y llenarte antes

Apunta el truco

Si masticas despacio, te llenas comiendo menos y disfrutando más. Pero es un hábito que se debe aprender y practicar. A continuación te damos las claves para lograrlo. ¡Sigue leyendo!

Adiós a la "fast culture"

Con la llegada del "fast food" se ha perdido el ritmo tranquilo de las comidas, y esto hace que comas más y peor.

● Pon la mesa siempre que puedas y crea un ambiente relajado.

● Respira hondo por la nariz y exhala por la boca. Saborea y aprecia lo que comes.

En familia o amigos

Si hablas, tardarás más en comer. Comparte el momento con la familia o amigos y conviértelo en un hábito. Aunque, ten cuidado, cuando hablamos tendemos a tragar aire y puede resultar indigesto, así que presta atención y habla entre bocado y bocado.

¡No te distraigas!

Elimina las distracciones antes de comer o, sin darte cuenta, habrás engullido la comida en un tiempo récord:

● Deja el móvil en otra habitación y apaga la televisión.

● No lleves el libro que estás leyendo a la mesa mientras comes.

● Olvídate del ordenador o de comer mientras estás trabajando.

Agua a pequeños sorbos

El agua no tiene calorías y llena el estómago, por eso si bebes un sorbo de agua entre cada bocado comerás más despacio y te sentirás saciada antes. Tomar un vaso de agua antes de comer también hará que te notes más llena y que comas menos. ¿Quieres aprender trucos para beber más agua?

Sin olvidar el cuchillo...

Si quieres sumar tiempo entre bocados, utiliza tenedor y cuchillo. Mientras masticas, puedes dejar los cubiertos en la mesa.

En trozos grandes

No te prepares los platos con la comida cortada a trozos pequeños porque acabarás comiendo más rápido. El acto de ir desmenuzando los alimentos con cuchillo y tenedor ralentizará el proceso.

Usa más los palillos

¿Por qué limitarlos al restaurante chino? ¡Puedes usarlos a diario! Comerás bastante más despacio que si utilizas el tenedor, por mucha maña que tengas. Si tu día a día no te lo permite, úsalos el fin de semana o días festivos.

Mejor con cáscara

Si tienes hambre entre las comidas puedes tomar frutos secos. Escógelos con su cáscara: nueces, cacahuetes, pistachos, etc., ya que abrir la cáscara hará que comas más despacio. Eso sí, no pases de los 20 g al día.

La fibra es tu gran aliada

Los alimentos más duros, y con más fibra, necesitan más tiempo de masticación. Que no falten en tu dieta verduras y legumbres, hortalizas crudas, frutas y frutos secos. Por ejemplo, el hummus acompañado de crudités es una deliciosa manera de incluir fibra en tu dieta.

Come en 20 minutos

Es el tiempo mínimo que debe durar cada comida para que la sensación de saciedad llegue a tu cerebro. Para ello, mastica bien y dedícale a cada bocado entre 10 y 20 segundos. Esto te ayudará a sentirte más saciada. También te permitirá mantener tu metabolismo activo, lo que te ayudará a quemar más calorías durante el día y a que bajes de peso.

¿Te quedas aún con hambre?

Si pese a todo todavía no te sientes saciada, acaba la comida con una infusión caliente. Si la tomas a pequeños sorbos tiene un efecto saciante:

● Té verde. Además, es termogénico y te hace quemar más calorías.

● Infusiones digestivas. Manzanilla, boldo, hinojo, poleo menta, anís o tomillo. Las infusiones combinadas digestivas también sientan muy bien.

● Café. Debido a su cafeína, ayuda a activar tu metabolismo.