Aunque cueste, debes empezar el día pensando en algo que harás hoy y que te hará feliz. Puede ser el café que te tomas en cuanto llegas a la oficina, el rato en el bus en el que aprovechas para leer tu libro o revista favorito, o estrenar ese vestido que tanto andabas buscando.
Por si no acabas de encontrar ese pequeño “momento”, tenemos 12 trucos que te ayudarán a empezar el día con energía sí o sí. Si quieres volver a estar activa de buena mañana, aplica estas recomendaciones a partir de hoy mismo.
1. Un simple vaso de agua tibia
Después de unas 8 horas de
sequía, el cuerpo, y sobre todo
el cerebro, necesita hidratarse. Un vaso grande (300 ml) de agua tibia con unas gotas de limón ayuda a poner en marcha el metabolismo. De hecho, según la doctora Holly Anderson de la Universidad de Cornell (EE. UU.), el cansancio que a veces notas por la mañana puede ser debido a la falta de hidratación.
2. Un café tempranero
El café solo aumenta un 30% la agudeza mental en tan solo 15 minutos. Luego el efecto se desvanece, por lo que si tienes un despertar lento, tómate el café cuanto antes. Eso sí, no te pases con el azúcar y no tomes más de dos al día.
3. Tomar frutos secos
Un estudio de la Universidad de Harvard (EE. UU.) ha demostrado que comer frutos secos sirve para controlar el peso. Mientras que otro de la Universidad Rovira i Virgili de Tarragona afirma que mejoran el ánimo, así que son todo ventajas. En el desayuno puedes sustituir embutidos, margarinas o lácteos grasos por almendras, avellanas, nueces, anacardos o semillas de lino.
4. Los copos inflados, mejor sin azúcar
Si te has aficionado al tazón de leche con cereales, piensa que estos suelen tener azúcar y suman demasiadas calorías. Además, a media mañana sentirás un bajón, por lo que es mejor elegir copos inflados de arroz, trigo, mijo, maíz, o cereales más exóticos, como quinoa, espelta o amaranto, pero sin azúcar.
5. Queso con nueces y manzana
Elige un queso fresco –Burgos, ricotta o requesón–, añade unas nueces, un toque de miel y acompáñalo con una manzana asada (no te pierdas la receta en el enlace). El contraste de texturas y de temperatura despierta el paladar. Es un desayuno súper equilibrado, porque aporta hidratos de carbono, proteínas, fibra y grasa.
6. Ducha revitalizante
Una buena ducha fría favorece la eliminación del tejido graso, ayuda a perder peso y, además, despierta (muy útil a primera hora de la mañana). No hace falta que empieces la ducha con agua helada, es mejor que te duches normal y, al terminar, aguantes 1 minuto con agua fresca y 45 segundos, a temperatura fría.
7. Infusiones como alternativa al café
Si no te gusta el café o eres sensible a la cafeína, puedes tomar una infusión con una cucharadita de romero y otra de menta. Prepárala en agua recién hervida durante 5 minutos. También te estimulará, por lo que empezarás el día a tope.
8. Desayunar bien adelgaza
Estudios de las Universidades de Colorado y Duke, en Estados Unidos, confirman que un desayuno nutritivo ayuda a perder peso o a mantenerlo bajo control. Los expertos recomiendan que un desayuno saludable tenga unas 450 calorías, que procedan en su mayoría de hidratos de carbono complejos, como el pan integral, avena, fruta..., con algo de proteína y fibra.
9. Zumo de naranja y cookies
La naranja tiene vitaminas C y B1, ácido fólico y aceites esenciales que activan el sistema nervioso. Las cookies integrales con chocolate aportan energía y fibra. ¿Puede haber una combinación mejor para empezar el día? Si quieres ponerle un toque picante a tu mañana, añade jengibre fresco rallado al zumo.
10. No te olvides de las proteínas
Junto a los cereales integrales y la fruta, es imprescindible un ingrediente proteínico para sentirnos con energía más tiempo. La facultad de Medicina de Harvard recomienda yogur griego, huevo, frutos secos o salmón.
11. Un poco de energía solar
Nada más despertarte, si puedes, abre una ventana orientada al Este y haz unas respiraciones profundas. Esto cortará la melatonina, la hormona responsable del sueño.
12. Un masaje contra la modorra
Es una técnica oriental que tiene un efecto similar al del café pero es totalmente inocua. Al despertarte, siéntate en el borde de la cama, frótate las manos hasta que estén calientes y masajea las orejas entre los dedos pulgar, índice y corazón. Después, tapa las orejas con las palmas, y con los dedos date pequeños golpes en la nuca.
Estos sencillos trucos lograrán que empieces la mañana bien activa y con ganas de comerte el mundo. Pero si a ti lo que te cuesta no es despertarte sino conciliar el sueño, descubre estos 30 trucos para dormir como un bebé.